El delegado del Gobierno justifica el cese del capitán de Cerro Muriano por «la pérdida de confianza»
CÓRDOBA, 11
El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha explicado este jueves que el cese del capitán investigado tras dirigir los ejercicios en los que murieron dos militares en Cerro Muriano (Córdoba) en diciembre pasado es «una decisión de los mandos militares del Ministerio de Defensa», que «tiene su origen en los lamentables y trágicos sucesos», de manera que es «un puesto de confianza que ha dejado de tener esa confianza».
En declaraciones a los periodistas, acompañado de la subdelegada en Córdoba, Ana María López, Fernández ha indicado que «se articula por parte de los mandos superiores un cese del destino, que es como se denomina», siendo «un destino que estaba vinculado a una libre designación y que después de un expediente que tiene como origen y motivo los hechos con el resultado de los dos militares muertos, lamentablemente, en el pasado mes de diciembre, ha traído como consecuencia esa pérdida de confianza».
En este sentido, ha apuntado que «se ha abierto el expediente correspondiente, controlado a la persona objeto del expediente y finalmente se ha acordado una medida que viene prevista en la Ley de Defensa, que es el cese del destino», después de que «se ha perdido la confianza absolutamente», ha aseverado. «Todo eso más allá y al margen de las medidas de otro tipo que le corresponden al juez togado militar, con la instrucción del procedimiento judicial militar que se lleva a cabo», ha apostillado.
De este modo, el delegado del Gobierno ha remarcado que «esto obedece al expediente que de forma inmediata se abrió», de manera que «primero se apartó de forma inmediata, que es una medida previa, y después, a través del expediente, se ha resuelto el cese del destino».
Al respecto, Fernández ha comentado que «está ahora mismo sin destino, a disposición de la Subdelegación de Defensa de Córdoba, que será donde se entienda cuál debe ser su destino en este momento», al tiempo que ha asegurado que «no está en contacto con ninguno de los compañeros o personas que están en el acuartelamiento».
En concreto, el mando pasa a la situación de servicio activo «pendiente de asignación de destino», según aparece publicado en el Boletín Oficial de Defensa (BOD) de este jueves y consultado por Europa Press. En él, el Ministerio especifica que contra la resolución de cese «se podrá interponer» en el plazo de un mes un recurso de alzada.
