El Consejo Electoral de Venezuela aprueba de forma «unánime» las normas para las elecciones parlamentarias

Se incrementa el número de diputados a elegir

El Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela ha anunciado este martes que ha aprobado de forma «unánime» las normas que regirán para las elecciones parlamentarias para el período 2021-2026, previstas para este año.

Así, la normativa aprobada «permitirá llevar a cabo la elección de los diputados y diputadas a la Asamblea Nacional», ha precisado el CNE, que no ha especificado aún la fecha de los comicios.

En un comunicado difundido a través de la red social Twitter, el CNE ha explicado que, en las nuevas normas, se ha incrementado el número de cargos a elegir, pasando de 167 diputados a 277, un 66 por ciento más.

La decisión obedece a la pretensión de lograr un «equilibrio» en el sistema electoral venezolano entre el voto a lista electoral y el voto nominal. Según el órgano electoral, esto se traducirá «en una representación ante la Asamblea Nacional que reflejará un 52 por ciento para el sistema proporcional y un 48 por ciento para el sistema nominal».

Es decir, la Asamblea Nacional tendrá 130 cargos a elegir mediante voto nominal más los tres votos indígenas, un total de 133 votos nominales y 144 votos en lista electoral, divididos entre 96 cargos en listas regionales y 48 en una lista de adjudicación nacional.

Por otra parte, ha decidido ampliar «considerablemente» la participación de las organizaciones políticas en las elecciones parlamentarias, ha indicado.

Para ello, ha informado de que, hasta el momento, están validadas 28 organizaciones nacionales, seis organizaciones de pueblos y comunidades indígenas y 52 partidos regionales, lo que suma «87 organizaciones con fines políticos activadas legalmente, totalmente habilitadas para participar en el venidero proceso electoral».

Asimismo, las normas aprobadas conservan las 87 circunscripciones electorales en Venezuela, las mismas que se aplicaron en las elecciones para la Asamblea Nacional en 2015.

El CNE ha insistido en su «posición irreductible» en la administración de los procesos electorales «bajo los principios de igualdad, confiabilidad, imparcialidad, transparencia y eficiencia, así como la personalización del sufragio y la representación proporcional sin excepción».

«A través de nuestro sistema electoral fortalecido y ahora mucho más moderno y amplio desde el punto de vista democrático, probado en diversas ocasiones, tenemos frente a nosotros una vez más el tiempo para elegir nuestro futuro y dirimir nuestras diferencias en paz», ha señalado el CNE, que ha invitado a los venezolanos a «participar en lo que será una de las fiestas electorales más importantes» del país caribeño.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha reiterado este mismo martes su llamamiento a los partidos políticos para que participen en las elecciones parlamentarias, en el marco de las renovadas tensiones con la oposición que lidera Juan Guaidó por las últimas decisiones judiciales.

La petición se ha producido después de que las principales formaciones de la oposición venezolana hayan fijado sus «condiciones mínimas» para participar en el proceso, que incluyen un CNE «independiente», la libre concurrencia de los partidos y sus dirigentes y observación internacional.

PULSO ELECTORAL

Los partidos opositores han reaccionado así a las últimas decisiones del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), por las que ha designado un CNE y cesado a la cúpula de Acción Democrática y Primero Justicia para sustituir a sus miembros por políticos afines al chavismo .

La nueva presidenta del CNE, Indira Alfonzo, ya invitó el lunes a todos los partidos políticos a participar en las elecciones parlamentarias. «Tenemos un compromiso con la democracia venezolana», dijo.

Algunos partidos, tanto el gobernante PSUV y sus aliados como los opositores afines al chavismo , como Cambiemos, han presentado sus propuestas para celebrar dichos comicios, según recoge la prensa venezolana.

Las elecciones parlamentarias de este año revisten especial importancia porque, si la oposición pierde la Asamblea Nacional, Guaidó dejará de ser su titular y, con ello, perderá la legitimidad constitucional para mantenerse como «presidente encargado» de Venezuela.