El Congreso limita a cuatro horas el registro presencial de iniciativas
El Congreso ha reducido a cuatro horas, de diez de la mañana a dos del mediodía, el registro presencial de iniciativas, si bien mantiene operativo el registro electrónico. Se trata de una de las medidas acordadas por la Mesa que dirige Meritxell Batet dentro del marco de actuación de la Cámara Baja frente al avance del coronavirus.
En condiciones normales, el horario del Registro del Congreso es de diez de la de la mañana a seis de la tarde, si bien el órgano rector ha decidido limitar a cuatro horas el registro de iniciativas como una de las actuaciones de prevención para reducir el riesgo de contagio en los lugares de trabajo.
La Mesa del Congreso y la Junta de Portavoces decidió este jueves suspender quince días la convocatoria de sesiones después de que en los últimos días algunos diputados hayan dado positivo en las pruebas del Covid-19.
La semana comenzó con el positivo del secretario general de Vox, Javier Ortega Smith, al que se han unido en las últimas horas otros compañeros, entre ellos su presidente, Santiago Abascal, dos miembros del Gobierno (Irene Montero y Carolina Darias) , un miembro de la Mesa de la Cámara (la vicepresidenta segunda, la popular Ana Pastor) y otros diputados del PP como la conquense Beatriz Jiménez.
EL CONGRESO NO HA CERRADO
Sin embargo, pese a la suspensión de la actividad parlamentaria en las próximas dos semanas, el Congreso continúa abierto para atender «cualquier asunto urgente», según recalcó este jueves la presidenta, Meritxell Batet.
Entre las medidas estratégicas para la organización del trabajo ante este escenario, el Congreso ha facilitado el teletrabajo a sus empleados cuando sea preciso aunque ha establecido unos servicios mínimos para garantizar las funciones esenciales. Además, también se han suspendido todas las visitas a la Cámara y todos los actos extraparlamentarios.
Entre las medidas preventivas, que la Mesa del Congreso acordó ya el pasado martes, se ha dispuesto información visual en los accesos a los edificios, ascensores, cafeterías y restaurantes; se han colocado dispensadores de gel hidroalcohólico en los mismos lugares y se ha extremado la limpieza en los elementos de uso común, como pomos de las puertas, botones de los ascensores, etcétera.
Asimismo, se han sustituido temporalmente las acreditaciones de plástico por etiquetas adhesivas desechables, y se ha indicado que las personas que accedan a los edificios tendrán que mostrar el DNI de modo que los funcionarios del cuerpo de ujieres tomen nota sin necesidad de contacto.