El CGE mantiene su previsión de crecimiento en el 6,3% en 2021 y la eleva al 5,9% en 2022
Estima que a final de año la tasa de paro se sitúe en el 15,5% y en 2022 se rebaje al 14,9%
El Consejo General de Economistas ha actualizado este viernes sus previsiones de crecimiento económico y ha decidido mantener en el 6,3% sus estimaciones para el PIB en 2021, pero ha revisado al alza las de 2022, hasta el 5,9%.
El Observatorio Financiero del Consejo General de Economistas ha revisado sus estimaciones tras los datos adelantados de contabilidad nacional correspondientes al segundo trimestre de 2021 publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que reflejan un incremento del PIB del 2,8%, y del 19,8% respecto al segundo trimestre de 2020, fundamentalmente por la contribución de la demanda nacional, que ha sido de 20,3 puntos.
No obstante, los economistas han advertido de que la disparidad del comportamiento de los distintos sectores productivos puede poner en peligro la recuperación y supervivencia de muchas empresas, pymes en su mayoría, muy endeudadas, que requieren ayudas directas y refinanciación del endeudamiento y, en cierta medida, cambios en su modelo de negocio.
Este incremento del ritmo de actividad en España hace que las expectativas respecto al segundo semestre del año sean positivas. Se espera una recuperación del turismo, fundamentalmente nacional, que sería deseable que pasara del 40% con respecto a 2019, lo que conllevaría un incremento de la actividad de las empresas del sector. Esto se podría traducir en un incremento del PIB en torno al 3% en el tercer trimestre y en menor medida, del 2,5%, en el cuarto trimestre.
MANTIENEN SUS PREVISIONES DE EMPLEO
En cuanto al empleo, el CGE espera que en el segundo semestre, la evolución sea positiva con el resurgir de la demanda y la reactivación del sector servicios. Por ello los economistas han dedido mantener su previsión de que la tasa de paro se sitúe en el 15,5%, con las cautelas citadas, mientras que estimamos un descenso en 2022 hasta el 14,9 %.
De su lado, la previsión de los economistas en cuanto a la deuda es que en los siguientes meses se vaya moderando (también considerando el incremento del PIB) para situarse a final de año en el 121,5%, en tanto que el déficit se prevé que se sitúe en 2021 en una horquilla de entre el 8% y el 9%.
No obstante, ante el alto nivel de la deuda, el déficit público y la alta tasa de paro, los economistas han insistido en la importancia de que una vez iniciada la senda del crecimiento, se aborden reformas necesarias fundamentales para cimentar el crecimiento -plan de consolidación fiscal, flexibilización mercado laboral, reforma inexcusable de pensiones, impulsar la competitividad de las empresas y la productividad, fomentar la inversión privada y foránea, etc.- que, de no producirse, «provocarán una factura muy pesada que comenzará a pagarse cuando termine la ayuda de Europa».
En cuanto al IPC, y después de que el dato adelantado del mes de julio se situase en el 2,9% mientras que la inflación subyacente se ha incrementado el 0,6%, los economistas estiman que a final de año el IPC se sitúe en torno al 2%