El CGCOM crea el Buen Quehacer del Médico , una guía de buenas y malas prácticas del profesional médico
El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) ha elaborado una guía con casos prácticos en forma de viñetas que recoge algunas situaciones a las que se puede enfrentar el profesional durante su desempeño, y que refleja una aproximación al buen y al mal quehacer médico.
Cómo abordar la confidencialidad del acto médico ante un problema de botellón, las relaciones entre médicos, los profesionales y las adicciones y la relación del facultativo con la empresa son algunos de los casos prácticos que ha abordado el colegio en esta guía.
Se trata de diversas situaciones a las que se pueden enfrentar los clínicos con relativa frecuencia, y que permiten focalizar el análisis del buen y mal quehacer a través de una serie de situaciones, preguntas y discusiones articuladas en diversas etapas.
La Guía BQM pretende orientar a los profesionales en el camino de las conductas y de las actitudes como la mejor garantía para la salud de los pacientes. Para lograrlo, el manual proporciona referencias éticas, deontológicas y legales para que los médicos las tengan en cuenta para tomar decisiones en su quehacer diario.
El presidente del CGCOM, el doctor Serafín Romero, ha manifestado la necesidad de seguir manteniendo un escenario de universalidad y de obligatoriedad en el entorno de la colegiación, y ha expresado la intención del colegio de médicos en seguir trabajando en fomentar los valores de la medicina, la cultura del profesionalismo y la renovación profesional.
«Esta iniciativa surge por nuestro compromiso social con una actuación de excelencia, desde la toma de decisiones con una perspectiva crítica en función de cada paciente. Queremos que sean una herramienta de utilidad en el camino de la excelencia profesional, en este sentido, las viñetas son muy útiles», ha destacado Romero.
El Buen Quehacer del Médico está inspirado en parte en el Good Medical Practice del General Medical Council británico, y tiene como objetivo servir de instrumento a los médicos para alcanzar un desempeño idóneo y «alcanzar la excelencia profesional», tal y como ha expresado el presidente de CGCOM, el doctor Serafín Romero.
Tal y como ha puntualizado el coordinador del Grupo de Trabajo del Buen Quehacer del Médico (BQM), el doctor Joan Monés, el BQM no es un código sino una guía, y por tanto no está sujeto a las restricciones que condiciona la redacción de normas cuyo incumplimiento por parte del médico puede conllevar la abertura de expedientes y sanciones.
«Los buenos médicos son responsables, competentes, actualizan sus conocimientos con sus compañeros y demuestran a través de procesos periódicos de validación que siguen los valores del buen desempeño profesional. El Buen Quehacer Médico complementa y ayuda al profesional médico en sitios y actuaciones a las que el Código no puede llegar», ha puntualizado.
Así, el doctor ha señalado la guía como una herramienta útil para proporcionar referencias e identificar situaciones difíciles o de conflicto, para garantizar la reflexión y resaltar las actuaciones negativas.
«La medicina conlleva el manejo de la incertidumbre, que genera situaciones de tensión. La intención de esta guía es orientar la actuación profesional con la prudencia necesaria en las situaciones difíciles. El BQM puede servir de ayuda a los profesionales de la medicina en aspectos tales como proporcionar referencias éticas, deontológicas, legales, e identificar elementos que se deben considerar en la toma de decisiones», ha explicado.
En este sentido, el BQM se complementa con la presentación teórica de ciertas actitudes y actos representativas de lo que no debe ser el buen quehacer médico, y que aparecen bajo el epígrafe de escenarios del mal quehacer médico.
Además, este curso conlleva la aplicación de créditos, y cada viñeta práctica tiene concedidos 2 crétidos de ECMECs (European Continuous Medical Education Credits) de SEAFORMEC (Consejo Profesional Médico Español de Acreditación) y UEMS (Union Européene de Médecins Spécialistes), que, en virtud de los acuerdos con el Ministerio de Sanidad, tienen una equivalencia de 0,3 Créditos Españoles de Formación Continuada en el Sistema Nacional de Salud.
«Todos los profesionales de la medicina necesitan formación, sin embargo, las competencias transversales a menudo quedan en entredicho y queda abierta la posibilidad de formarse en estas competencias, que incluyen la ética y la deontología. Los colegios son responsables de formar a los profesionales en estas competencias, a través de iniciativas como esta», ha manifestado el director del SEAFORMEC, el doctor Arcadi Gual.
«Se trata de un documento dinámico que se actualiza anualmente y depende de una estructura operativa, fácil y cómoda, muy ilustrativa para el profesional, a la que puede sacarle toda la utilidad que quiera. Tenemos la pretensión de ir incorporando aquello que va ocurriendo en la sociedad y que afecta a la profesión», ha explicado.
Estos casos prácticos serán la base para un curso de la Fundación para la Formación de la OMC que ya ha sido iniciado. Se trata de una formación para médicos que se pueden enfrentar a casos clínicos de este tipo con relativa frecuencia y cuyo objetivo es servirles como ayuda para revisar y mejorar su práctica con los pacientes.
«Se trata de un documento orientado hacia el funcionamiento ético, moderno y comprometido de la profesión médica que utiliza una vía inductiva de aprendizaje, es decir, aquella en la que un problema genera conocimiento», ha valorado el director de la Fundación para la Formación de la OMC (FFOMC), el doctor José Ramón Repullo, que ha detallado cómo han trabajado en un «modelo formativo actualizado gracias a la presentación gráfica en forma de viñetas, con pequeñas píldoras informativas que encajan con un modelo informativo moderno y que reflejará el proceso de validación médica de la colegiación».
Además, desde el CGCOM han informado de que ya están puestas en marcha cátedras de profesionalismo en varias facultades de medicina para que el BQM forme parte de la acción formativa.