El Centro Botín reúne obras de ocho artistas en la muestra Itinerarios XXIV
Los trabajos ofrecen una instantánea de las últimas tendencias artísticas
El Centro Botín arranca su programación de 2018 con la muestra Itinerarios XXIV , del 13 de marzo al 3 de junio, una cita expositiva que reúne el trabajo de ocho artistas que fueron seleccionados en la última convocatoria de Becas de Artes Plásticas de la Fundación Botín.
Irma Álvarez-Laviada (Gijón, 1978), Elena Bajo (Madrid, 1976), Josu Bilbao (Bermeo, Vizcaya, 1978), Felipe Dulzaides (La Habana, Cuba, 1965), Rafa Munárriz (Tudela, Navarra, 1990), Alex Reynolds (Bilbao, 1978), Leonor Serrano Rivas (Málaga, 1986) y Pep Vidal (Tarrasa, 1980) son los creadores incluidos en esta muestra, que ofrece una instantánea de las últimas tendencias artísticas.
Los ocho fueron seleccionados entre las 703 solicitudes procedentes de 53 países presentadas en 2016 a la convocatoria de las becas por un jurado compuesto por Ibon Aranberri, Lorena Martínez de Corral, Bárbara Rodríguez Muñoz y Wilfredo Prieto.
La muestra ha sido presentada este lunes en rueda de prensa por su comisario, y director artístico del Centro Botín, Benjamin Weil, quien ha explicado que los trabajos, recogidos en un catálogo editado por la Fundación Botín, están realizados en disciplinas y localizaciones muy variadas, aunque sus autores comparten una preocupación común por la problemática del espacio como parte esencial de las obras, y la necesidad de una experiencia física en tiempo real.
Y lo hacen, a su juicio, «justo en un momento en el que pasamos cada vez más tiempo ante pantallas que, además de actuar como herramientas de comunicación, ejercen también una función intermediadora».
Para Benjamín Weil, este marcado interés por usar el espacio como elemento clave del trabajo, suscita también una reflexión sobre qué es hoy en día la realidad y cómo los límites entre el aquí y el ahí son cada vez más difusos.
Por ello, el tiempo y el espacio de la exposición se convierten en «elementos claves para desplegar unas propuestas artísticas que vuelven a escenificar unos fragmentos de realidad que, de otra manera, se soslayarían o pasarían desapercibidos», asegura Weil, quien también apunta que «compartir el espacio de la muestra fomenta un diálogo entre los distintos proyectos, poniendo de relieve la proximidad de algunas preocupaciones comunes y construyendo así una buena perspectiva de las tendencias más recientes de la creación contemporánea».
OBRAS
En la muestra, la artista asturiana Irma Álvarez-Laviada presenta un un proyecto multidisciplinar, Reversibilidad y Utopía , centrado en la obsesión por la materia y la concepción de la reversibilidad del tiempo en relación a las dinámicas de apropiación de las obras.
Por su parte, la madrileña Elena Bajo investiga en Urania s Mirror el impacto ambiental y social que tienen las economías de explotación en la tierra y en las comunidades más antiguas, especialmente en algunos lugares de América Latina.
El vasco Josu Bilbao, con esàk-esà , una especie de desahogo emocional que hace referencia directa a nociones espaciales, entiende los procesos de escultura como una serie de relaciones y aperturas, dando cuerpo a la forma, al organizar en el suelo objetos y restos de objetos encontrados que le ayudan a irse dando cuenta de qué está hecho su problema .
El cubano Felipe Dulzaides, con Deja tu tono en el mensaje , opta por indagar en cómo la poesía y la experiencia poética nos afectan. Por ello, en su proyecto propone una serie de intervenciones dentro del rico paisaje sonoro de la ciudad de La Habana, usando las armónicas de los afiladores de cuchillos y tijeras que recorren la ciudad en sus bicicletas construyendo su propia melodía.
Rafa Munárriz, desarrolla su práctica artística en Bloqueo relativo a partir de percepciones tridimensionales. Conceptualmente su trabajo se sitúa dentro del espacio que confronta al ciudadano con su entorno, marcado por las limitaciones urbanas, sistemas de tránsito y políticas de circulación.
Por su parte, la actriz y cineasta bilbaína Alex Reynolds, presenta A Fox Comes In , una exploración cinematográfica de la noción de hospitalidad y sus consecuencias a través del sonido, que atraviesa e invade con extrema facilidad espacios y cuerpos, transformándose a veces en exaltación, y otras en violencia.
La malagueña Leonor Serrano Rivas expone la vídeo-instalación The dream follows the mouth (of the one who interprets it) , que presenta dos movimientos escultóricos entrelazados que, al desarrollarse, solapan el fondo y la figura a través de la danza y el tarareo. Compuesto por una proyección en un primer plano y, en un segundo, un área de bastidores poblada por objetos, la combinación crea una trama a partir de pequeñas acciones performativas generadas por un grupo de mujeres.
Por último, el catalán Pep Vidal desarrolla con El árbol y las vacas un método que le permite entender y relacionarse mejor con el mundo y poder mostrar la realidad escondida. Su trabajo consta de seis esferas de PVC hinchables blancas organizadas en fila, de mayor a menor, o viceversa, según se mire.