El Cabildo de Gran Canaria pide que se blinde al sector pesquero frente al uso del cerco en la pesca de atún
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 23
El Cabildo de Gran Canaria ha reclamado a la Unión Europea (UE) y a los Gobiernos de España y de Canarias que se blinde al sector pesquero frente al uso del cerco en la pesca de atún.
En este sentido, el Pleno de la Corporación insular aprobó este martes una declaración institucional en la que muestra su firme rechazo a la propuesta de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) de poner en marcha un plan experimental del uso del cerco para la captura de atunes y la cría de rabiles y atunes rojos en las aguas canarias.
Según informa el Cabildo, se trata de dos actividades que «supondrían un peligroso revés para el sector pesquero artesanal canario, que podría ver peligrar su supervivencia, así como para el medio marino del archipiélago».
Por ello, ha instado al Gobierno autonómico, al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación del Ejecutivo de España y a la presidenta de la Comisión Europea a ejercer las acciones correspondientes para salvaguardar los intereses de la pesca artesanal de las islas y los ecosistemas marinos y sus recursos.
Todo ello, añade, respetando además la opinión contraria a esta iniciativa que también han hecho patente las distintas federaciones canarias de cofradías de pescadores.
La declaración aprobada por el pleno argumenta que la propuesta de la ICCAT «atenta de lleno contra los intereses del sector pesquero artesanal y los frágiles ecosistemas marinos de las Islas, ya que dicho proyecto tiene como objetivo evaluar el posible desarrollo futuro de la pesca con red de cerco industrial y el crecimiento y engorde del atún rojo y del rabil en esta zona».
Porque –continúa– el uso del cerco para la captura de atunes está actualmente prohibido por las normativas autonómica y estatal, tanto en aguas interiores como aguas exteriores del mar territorial de Canarias».
De hecho, el Cabildo especificó que «este arte solo está permitido tanto para la captura de pequeños pelágicos como longorones, sardinas y caballas», que directamente se comercializan para su uso como el cebo vivo que es necesario como carnada para la pesca con anzuelo de atunes y otros demersales de gran tamaño.
Por todo ello, ha considerado que esta autorización «supondría un cambio sin precedentes para la pesca tradicional de Canarias, la cual se valora por su artesanalidad», ya que, como detallan, «los atunes son capturados uno a uno, con liña o con caña, método tremendamente sostenible, que ha permitido a Canarias, entre otras cuestiones, defender el aumento de su cuota anual de atún rojo, ya que no impacta sobre este recurso pesquero tan valioso, y hasta hace poco tiempo en peligro».



