El buque Allure of the Seas llegará finalmente a Cádiz para ser reparado tras permitirlo Sanidad
CÁDIZ, 14
El Ministerio de Sanidad ha levantado finalmente la prohibición de entrada en Cádiz del crucero Allure of the Seas, de la compañía Royal Caribbean, que llegará este fin de semana a Navantia Cádiz para someterse a trabajos de reparación, como tenía previsto en un principio.
Según fuentes consultadas por Europa Press, actualmente lo que está permitido es que esté a bordo la tripulación mínima de seguridad, que podría ser de unas 30 personas aproximadamente, mientras que la previsión era la llegada de unas 300 personas de diferentes puntos de la Unión Europea.
No obstante, según ha avanzado La Voz, la administración central argumentaba que la tripulación excedía el tope estipulado de 40 tripulantes por la legislación del estado de alarma. Sin embargo, la consignataria BC Tours, encargada de realizar las gestiones, ha alegado que con ese número tan reducido es imposible operar en ese barco, por lo que finalmente, y tras la mediación de Puertos del Estado, Marina Mercante y la Asociación Española de Consignatarios, Sanidad Exterior ha autorizado la entrada del crucero en el astillero con una tripulación de 300 personas.
El buque se encuentra en Gibraltar, donde ha realizado una escala técnica este jueves para transferir tripulación al crucero Jewel of the Seas . Según ha informado la Autoridad Portuaria de Gibraltar en una nota, de conformidad con la decisión del Gobierno de Gibraltar de suspender las visitas de cruceros a Gibraltar durante la actual crisis de la enfermedad covid-19, la presencia de los dos cruceros no se trata de visitas ordinarias, dado que las embarcaciones no tienen ningún pasajero a bordo y pararán exclusivamente para repostar, aprovisionarse, descargar basura y transferir tripulación entre las embarcaciones.
En este sentido, ha señalado que ningún miembro de la tripulación podrá desembarcar de las embarcaciones, salvo aquellas personas que se vayan a transferir de una embarcación a otra, y no se permitirá que ningún empleado en tierra suba a bordo de la embarcación durante su breve estancia en Gibraltar.