El Banco de España sitúa el riesgo sistémico en el sector inmobiliario en un nivel intermedio

Aunque no existen «señales de alerta», la institución aboga por una «monitorización estrecha» del sector

El Banco de España sitúa los riesgos sistémicos cíclicos en el sector inmobiliario en un nivel intermedio, de forma que, «aunque no existen señales de alerta», aboga por realizar «una monitorización estrecha» del sector.

Así lo señala en un artículo difundido este martes en el que analiza la capacidad predictiva, tanto de los indicadores que utiliza actualmente para identificar el nivel de riesgo sistémico cíclico en el sector inmobiliario como de la información complementaria en el crecimiento acumulado de dos años del precio de la vivienda.

Según la institución, la evolución reciente de los indicadores de desequilibrios en los precios del sector inmobiliario señala que éstos se mantienen en niveles moderados y cercanos a su valor de equilibrio, con datos hasta el tercer trimestre de 2023.

«El nivel de estos indicadores en la última fecha disponible dentro de la muestra analizada sugiere que el nivel de riesgo sistémico cíclico en el sector no es elevado, pero tampoco bajo», afirma el Banco de España.

En su artículo, el organismo recuerda que el sector inmobiliario residencial es especialmente importante para la estabilidad financiera, tal y como se observó con la crisis inmobiliaria que experimentó España a partir de 2008.

Por ello, para la institución, resulta «esencial» contar con indicadores que emitan señales de alerta tempranas para una identificación efectiva de los riesgos.

El Banco de España recuerda que el sector inmobiliario es muy relevante para la economía española por su importancia para el empleo y la inversión y por su potencial impacto en la estabilidad del sistema financiero.

En este sentido, subraya que el crédito hipotecario es la principal fuente de endeudamiento de los hogares y que su vencimiento medio en el momento de la concesión es de 26 años. Con datos a septiembre de 2023, este crédito representa el 40,1% del crédito bancario total en España destinado a otros sectores residentes.

«Los desequilibrios inmobiliarios aumentan las dificultades para el acceso a la vivienda y, por tanto, generan retos sociales e ineficiencias macroeconómicas. Por todo esto, es importante realizar un seguimiento de este sector y contar con herramientas que permitan prevenir la acumulación de riesgos en él», afirma la entidad.

El Banco de España cuenta con una serie de herramientas que le permiten intervenir para prevenir la materialización del riesgo sistémico.

En concreto, el colchón de capital anticíclico (CCA) es una de las herramientas macroprudenciales disponibles en la legislación española para hacer frente a estos riesgos que evolucionan a lo largo del ciclo financiero y que pueden afectar negativamente al crecimiento económico.

No obstante, la institución utiliza indicadores adicionales para la toma de decisiones acerca de la activación del CCA, como, por ejemplo, medidas de sobrevaloración de la vivienda y otros indicadores para medir posibles desequilibrios en el sector inmobiliario.