El Banco de España, preocupado por el desincentivo de Trump a la labor climática de los bancos
La subgobernadora de Banco de España, Soledad Núñez, ha expresado este miércoles su preocupación por el hecho de que las políticas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, puedan suponer un «desincentivo» para los bancos en cuanto a su labor a la hora de contribuir a atajar el cambio climático.
«Antes hablábamos de las nuevas políticas de Trump. A mí en ese sentido lo que más me preocupa es el desincentivo que pueda suponer para los bancos de acompañar a la economía y para la financiación hacia una economía sostenible», ha indicado la subgobernadora durante su intervención en un acto celebrado por Afi.
«Espero que no sea así porque el cumplimiento de la labor del sistema financiero en la financiación sostenible (…) tiene que seguir con fuerza a pesar de estos malos vientos. Porque además eso entra dentro de aprovechar las oportunidades que pueden surgir y mitigar los riesgos y esto va en beneficio de la propia banca», ha explicado.
En todo caso, ha indicado que a pesar de las «malas noticias» por el posicionamiento de la nueva Administración Trump ante evidencia científica del cambio climático y ante los acuerdos internacionales en materia climática, «el compromiso europeo para seguir liderando la transformación de nuestra economía sigue siendo firme».
Núñez ha enfatizado que cada vez más los riesgos climáticos entrañan consecuencias económicas, por lo que la banca debe «gestionar adecuadamente» sus riesgos, incluidos los climáticos.
«Los bancos deben acompañar a las empresas en su transformación y he de reconocer que en algunos casos deberán desempeñar, junto con otros agentes, labores de impulso y de, llamémosle así, pedagogía, en un diálogo permanente», ha recalcado.
En este sentido, la subgobernadora ha recordado que el reto a corto plazo es que los bancos elaboren sus planes de transición, y le ha recordado a la banca que no pueden ser una «declaración de intenciones», sino un «compromiso firme».
Por otro lado, respecto a la digitalización, Núñez ha indicado que la resiliencia operativa es un tema que cada vez demanda «más atención y recursos» por parte de los bancos. Si en 2017 se reportaron 27 ciberincidentes entre las entidades significativas europeas, en 2024 esa cifra llegó a 153.
PATRONALES
En el acto también han intervenido el director general de CECA, José María Méndez, y la presidenta de la AEB, Alejandra Kindelán.
El máximo representante de CECA ha recordado en su discurso que uno de los retos que tiene el sector por delante es la simplificación regulatoria. «El exceso de normas puede afectar a la innovación y limitar la competitividad», ha indicado.
Además, ha pedido un campo de juego equilibrado porque las entidades financieras ya no solo compiten entre ellas, sino también con proveedores tecnológicos que no tienen los mismos requisitos de capital o de liquidez.
En este punto ha coincidido la presidenta de la AEB, que ha pedido una regulación «más equilibrada» para que la banca cumpla con su función de apoyo a la economía real.
Por otro lado, aunque Kindelán ha puesto en valor que la rentabilidad de la banca ha alcanzado el 14,3%, ha recordado que es «todavía inferior a muchos sectores del Ibex».