El astillero gallego Rodman Polyships entrega dos lanchas de instrucción a la Armada Española
VIGO, 17
El astillero gallego Rodman Polyships ha entregado a la Armada Española dos lanchas de instrucción del modelo Rodman 66 rediseñadas de acuerdo con los requerimientos técnicos y de funcionalidad exigidos por el armador para permitir la mejor adaptación a la finalidad para la que se emplearán.
Las Rodman 66 han sido bautizadas como M.M. Bustelo Pavón y M.M. Pérez Verdú y su puerto base se situará en Ferrol. En concreto, han sido encargadas por Navantia, que las ha cedido a la Armada Española para que operen como lanchas de instrucción en la Escuela Superior de Especialidades de la Estación Naval de la Graña (Esengra).
Según ha detallado el astillero, representantes de Navantia y la Armada Española se han mostrado satisfechos con las embarcaciones y sus prestaciones, que comprobaron durante las pruebas oficiales y el acto de entrega, celebrado en las instalaciones de Rodman Polyships en Meira, en Moaña (Pontevedra).
Así, ha destacado que la entrega de este nuevo modelo de patrullera consolida su posición como «uno de los líderes mundiales en la construcción de embarcaciones profesionales en PRFV».
De este modo, ha resaltado que los barcos profesionales y embarcaciones de recreo que se contruyen en sus instalaciones «son reconocidos y altamente valorados por los armadores más exigentes», además de por «organizaciones y administraciones gubernamentales de todo el mundo».
CARACTERÍSTICAS
El modelo Rodman 66 de patrulleras de vigilancia costera cuenta con 20 metros de eslora y, en este caso, se ha adaptado a las necesidades de su nuevo armador mediante su conversión en una lancha de instrucción de 20,5 metros de eslora y 4,9 metros de manga.
Las lanchas se han diseñado para que operen en zonas próximas al litoral español y realicen tareas de instrucción de los alumnos de la Esengra. Así, se estimó una vida mínima activa de 20 años en el desarrollo y construcción de las embarcaciones, un periodo durante el que se prevé que se realicen las labores de mantenimiento precisas.
La construcción del casco y la cubierta se ha llevado a cabo con fibras de poliéster reforzado con fibra de vidrio y resinas de vinil éster e isoftálicas, homologadas para uso marino.
Además, las embarcaciones pueden alcanzar velocidades de más de 20 nudos y cuentan con una autonomía de 500 millas. También pueden operar de noche y sumar hasta 16 tripulantes para los que disponen de camarotes.