EH Bildu cree que el Gobierno podría estar tentado a adelantar elecciones, pero podría conllevar la subida de Vox
Aizpurua pide políticas sociales «ambiciosas» para «frenar a la derecha» porque el Ejecutivo «se convierte en el reino de oportunidades perdidas»
BILBAO, 27
La portavoz de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mertxe Aizpurua, cree que el Gobierno de Pedro Sánchez podría «tener la tentación» de adelantar las elecciones generales, pero ha advertido que ello supondría «un grave riesgo» y traer consigo un crecimiento de Vox.Además, ha reclamado al Ejecutivo central políticas sociales «ambiciosas», que supongan «un freno a la derecha» y eviten así el crecimiento de Vox, fruto de la «desafección política».
En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, la representante de la coalición soberanista ha considerado, además, que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, podría «tener la tentación» de adelantar las elecciones generales, dado que Unidas Podemos «no está en su mejor momento» y el PP se encuentra «hecho trizas». No obstante, ha advertido que ello supondría «un grave riesgo» y traer consigo un crecimiento de Vox.
En este contexto, ha afirmado que en el pasado se hablaba «de derecha extrema y extrema derecha», pero ahora «todo se diluye y, al final, viene a ser todo lo mismo». «Vox ha ayudado a blanquear y hacer bueno al PP. Era el riesgo que había con un Vox muy fuerte. El PP se ha ido yendo hacia la derecha y acercando porque Vox le ha atraído como el imán al hierro. La incógnita en este momento es si va a salir un PP que se centre más y homologado a la derecha europea o se echa en brazos de Vox», ha añadido.
Por otro lado, ha defendido que, desde el plano político, el actual Ejecutivo de coalición tiene la oportunidad de dar pasos que supongan «un freno a la derecha» mediante políticas sociales «ambiciosas». Así, ha lamentado que la «desafección política redunda en votos a Vox» al ver la ciudadanía que los partidos políticos «no dan las respuestas que necesitan».
En este sentido, ha considerado que la reforma de la denominada ley Mordaza se trata de «otra de las oportunidades perdidas» y ha lamentado que el actual Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos «se está convirtiendo en el reino de las oportunidades perdidas».
Tras defender que se está ante una «oportunidad histórica», ha señalado que el Ejecutivo cuenta con «los apoyos suficientes para dar pasos en diferentes temas, pero parece que siempre se queda a medias». «La izquierda siempre actúa de manera más timorata que la derecha. La ley Mordaza se queda escasa, como pasó con reforma laboral y como puede pasar también con la ley de Memoria Histórica», ha añadido.
No obstante, y pese al voto contrario de EH Bildu a la reforma laboral, Aizpurua ha sostenido que por parte de la coalición soberanista el denominado bloque de investidura tiene «buena salud» y su formación mantiene «los objetivos» que querían «lograr» al inicio de la legislatura. «Quizá puede entrar zozobra en el PSOE para ver qué camino toma a partir de ahora. Nosotros lo tenemos clarísimo y no se da esa zozobra porque sabemos dónde queremos ir», ha añadido.
PNV
Asimismo, ha afirmado que los intereses de EH Bildu en el Congreso y los que defiende el PNV son «en algunas materias son comunes y en otras difieren mucho».
«Nosotros en los contenidos hacemos mucho hincapié. En los temas sociales el PNV se diferencia mucho aunque a veces lo camufla en temas competenciales. Es una trampilla que usa. Aquí se opone a algún tema de ámbito social que supone un avance escudándose en el tema competencial y así evita decir que no está de acuerdo con los planteamientos sociales que contiene esa iniciativa», ha argumentado.
Por contra, ha rechazado que se den en la actualidad diferencias entre EH Bildu y PNV respecto a la política penitencia que se aplica a los presos de ETA, cuestión que sí se dio en el pasado cuando «el PNV tuvo una posición totalmente contraria y fue quien amparó la dispersión».
En esta línea, ha rechazado que EH Bildu haya alcanzado acuerdos con el Gobierno central sobre los presos de ETA y ha apostado por «aplicar la legislación vigente».
«No puede haber una situación de excepcionalidad. Ese es el punto de partida y a partir de ahí hay que solucionar las consecuencias del conflicto. En ningún país del mundo pasa que no se quiera poner solución a que las consecuencias del conflicto se pudran en el tiempo», ha expresado, al tiempo que ha reconocido que se trata de una cuestión que siempre ha ido «lenta».