EEUU lamenta la falta de la libertad de culto en Corea del Norte y denuncia actos de represión
El Gobierno de Estados Unidos ha lamentado la falta de libertad de culto en Corea del Norte, una situación que se ha estancado durante la última década, y ha denunciado la existencia de actos de represión por parte de las fuerzas de seguridad contra la población civil por cuestión de religión.
Así lo ha manifestado en su informe anual sobre libertad religiosa a nivel internacional, en el que ha expresado que la situación en Corea del Norte «apenas ha variado durante los últimos diez años». El documento, que analiza la situación en 199 países y territorios de todo el mundo en base a informaciones oficiales, grupos religiosos y organizaciones no gubernamentales, sitúa a Corea del Norte y otros once países como lugares de «especial preocupación».
En este sentido, ha apuntado a que el país asiático registra «violaciones de las libertades religiosas por 22º año consecutivo», una posición que apenas ha variado en la lista negra estadounidense, según recoge un comunicado del Departamento de Estado.
«Diversas fuentes indican que la situación apenas ha cambiado desde que se publicó en 2014 la Comisión de Investigación de la ONU sobre los Derechos Humanos en Corea del Norte, que hallaba indicios de que las autoridades negaban los derechos y libertades de culto. Esto apuntaba a que el Gobierno cometía violaciones de los Derechos Humanos que constituían crímenes contra la Humanidad», recoge el texto.
«El Gobierno ha seguido ejecutando, torturando, arrestando y abusando físicamente de individuos por sus actividades religiosas», sostienen desde Washington, donde el secretario de Estado, Antony Blinken, ha pedido poner en marcha medidas para «salvaguardar la libertad de culto en todo el mundo».
«Se trata de proteger una parte esencial de lo que implica ser humano: la capacidad de explorar algo mayor que nosotros mismos y decidir en qué creer y en qué no creer, sin miedo a la represión», ha apuntado antes de manifestar que «el derecho a elegir las propias creencias nos permite aprender de aquellos que son diferentes y celebrar lo que tenemos en común».