Duque celebra que la estrategia antidroga de Estados Unidos está «totalmente alineada» con la de Colombia
El presidente de Colombia, Iván Duque, ha celebrado que la estrategia antidroga publicada este lunes por Estados Unidos está «totalmente alineada» con la política colombiana en esta materia.
La Administración estadounidense, presidida por Joe Biden, anunció este lunes su nuevo proyecto para la lucha contra las drogas en Colombia. Este plan apunta directamente a tres pilares como son la reducción de la producción, el desarrollo en zonas rurales y la protección del medio ambiente.
«Tenemos erradicación de cultivos, sustitución de cultivos, desarrollo alternativo y tenemos la posibilidad de utilizar mecanismos de precisión donde corresponda. Todo está incluido», ha precisado este martes Duque, según recoge la emisora colombiana W Radio.
Asimismo, ha puesto en valor las direcciones establecidas en Ruta Futuro –el proyecto colombiano para la lucha contra la droga–, y ha manifestado que «gracias a esos lineamientos» se han llevado a cabo «las mayores incautaciones de droga en el país, superando las 500 toneladas junto con destrucciones de laboratorios».
Es por esto que, Duque ha remarcado que los gobiernos de Colombia y Estados Unidos están «alineados» y que con mecanismos de precisión el país seguirá avanzando en la lucha contra la droga.
PROYECTO ANTIDROGA DE EEUU
La Administración Biden lanzó este lunes una nueva estrategia antidroga en Colombia basada en la lucha por la reducción de la producción, el desarrollo en zonas rurales y la protección de las zonas naturales.
La Oficina de Política Nacional para el Control de Drogas (ONDCP, por sus siglas en inglés) estableció que el primer pilar de la nueva estrategia consiste en la reducción de la oferta de sustancias vinculando la erradicación y destrucción de laboratorios, con la reducción de la demanda, los esfuerzos contra el blanqueamiento de capitales y el enjuiciamiento de los narcotraficantes.
En segundo lugar se marca la «implementación integral de los acuerdos de paz» y una inversión en desarrollo rural, seguridad ciudadana y acceso a la justicia para proteger a los líderes comunitarios, reducir la dependencia de la coca y ampliar la formalización del suelo.
Por último, la hoja de ruta apunta a la protección ambiental y los esfuerzos necesarios para contrarrestar las acciones de los narcotraficantes contra el medio ambiente y explorar intervenciones adicionales que puedan generar «múltiples beneficios».