Draghi exige una «reflexión» sobre las misiones internacionales y abordar la «inestabilidad» del Mediterráneo
Expresa su apoyo a «una reforma consensuada» del Consejo de Seguridad
El primer ministro de Italia, Mario Draghi, ha exigido este jueves ante la Asamblea General de la ONU una «reflexión» sobre el futuro de las misiones internacionales tras la retirada de Afganistán, al mismo tiempo que ha pedido que otras crisis no «distraigan» a la comunidad internacional de la «inestabilidad» del Mediterráneo.
«La crisis en Afganistán, y en particular su rápido deterioro tras la retirada, exige una reflexión sobre el futuro de las misiones internacionales», ha subrayado Draghi, quien ha indicado que Italia ha decidido dirigir los recursos previamente destinados a la formación de las fuerzas afganas, a «fines humanitarios».
Respecto al replanteamiento de las misiones, ha incidido en que es necesario preguntarse «cuáles son los objetivos» y «cuáles son la mejor manera de perseguirlos», si bien ha aseverado que las «intervenciones internacionales» son un «instrumento esencial para apoyar la paz y la seguridad».
En relación con el país centroasiático, ha reiterado también que es necesario defender los Derechos Humanos y ha lamentado que el Gobierno anunciado en el país «no responde a la expectativas» de inclusividad, ante lo que ha pedido a los talibán que «se comprometan con actos».
«La situación humanitaria en Afganistán es, sin duda, la preocupación más acuciante y compartida, sobre todo de invierno que se aproxima», ha ahondado en referencia a la crisis humanitaria en el país. Al respecto, ha confiado en Naciones Unidas para «coordinar» una respuesta «rápida y coherente».
Asimismo, ha advertido de la «amenaza» que supone la presencia de grupos afiliados a Al Qaeda y Estado Islámico, por lo que ha llamado a la comunidad internacional a «cooperar eficazmente», en especial «compartiendo información de inteligencia».
«Italia lleva mucho tiempo participando a nivel internacional en la lucha contra el terrorismo. Debemos combinar nuestros objetivos de seguridad con la prevención, la protección de los Derechos Humanos y el respeto al Estado de Derecho. Igualmente, debemos abordar tanto las causas económicas como las sociales que conducen a la radicalización y al extremismo violento», ha apostillado al respecto.
Por otro lado, Draghi ha reafirmado «con convicción» el compromiso de Italia en el seno de Naciones Unidas y ha reivindicado que es el «mayor contribuyente» de cascos azules entre los países occidentales. En este sentido, ha llamado a la Unión Europea a «reforzar su papel» en este ámbito.
En otro orden de cosas, ha reclamado que las crisis en regiones como la asiática no «distraigan» a la comunidad de la «inestabilidad» que se sigue afectado al Mediterráneo en general.
El primer ministro italiano se ha referido, en este contexto, a Libia, una país para e que ha pedido una «solución sostenible e inclusiva» y sobre el que ha destacado que es prioritario «renovar su marco institucional nacional», de forma «unificada, sin interferencia externa y bajo la protección de la ONU».
«La comunidad internacional debe colaborar con las instituciones libias y el pueblo libio para superar el actual estancamiento.A pesar de esta coyuntura crítica, debemos garantizar que las elecciones previstas para el 24 de diciembre puedan celebrarse y que el alto el fuego se aplique plenamente», ha remachado.
Igualmente, se ha referido a la crisis libia en materia de migración, para lo que ha urgido una «respuesta conjunta» de la comunidad internacional. «Debemos luchar eficazmente contra el tráfico de seres humanos, garantizar una movilidad internacional regular y proteger la vida de las personas», ha apelado, para señalar a la necesidad de «un reparto justo de deberes y responsabilidades».
Sobre esta cuestión, ha instado a la UE y sus miembros «reforzar el diálogo» sobre cuestiones migratorias con los países de origen y tránsito de los migrantes, de manera que, a su juicio, se pueda «lograr una responsabilidad conjunta de la gestión de los flujos».
CONSEJO DE SEGURIDAD
Por otra parte, Draghi ha expresado su apoyo a «una reforma consensuada» del Consejo de Seguridad, para «reforzar la representación regional y garantizar una distribución geográfica más justa de los puestos mediante un aumento del número de miembros elegidos».
«Nuestro objetivo es que el Consejo sea más representativo, democrático, eficiente, transparente y responsable. La respuesta a los retos que afrontamos –la pandemia, el cambio climático y las crisis internacionales– radica en un multilateralismo eficaz, basado en un diálogo inclusivo y abierto», ha destacado.
Respecto a la pandemia, ha criticado «las diferencias dramáticas» en la distribución de vacunas y ha aseverado que estas «disparidades» son «moralmente inaceptables». «Tenemos que aumentar la disponibilidad de vacunas para los países pobres y superar los obstáculos logísticos para distribuirlas donde más se necesitan», ha demandado.
«Además, debemos preservar a nivel mundial la libre circulación de las vacunas y de las materias primas materias primas necesarias para producirlas», ha agregado, para enfatizar en la intención de Italia de triplicar las donaciones al mecanismo COVAX de 15 a 45 millones de dosis para finales de 2021.
El primer ministro italiano ha apuntado, por otra parte, a que con la Presidencia de su país, el G20 promueve medidas económicas para ayudar a los países «más frágiles del mundo» a superar las consecuencias de la pandemia.
Al respecto, ha recordado que la comunidad debe «estar preparada» para una acción «aún más ambiciosa» en apoyo de los países más pobres, especialmente en África: «Debemos aumentar las inversiones para que la juventud africana pueda participar plenamente en su desarrollo social, económico y político».
Por último, Draghi ha asegurado que otra de las «emergencias» que prioriza su país es el cambio climático, por lo que lo ha colocado en el «centro» de la agenda de la Presidencia italiana del G20.