Dimite por «motivos personales» el vicepresidente de Costa de Marfil
Días después del fallecimiento del primer ministro y candidato a la Presidencia Amadou Gon Coulibaly
El vicepresidente de Costa de Marfil, Daniel Kablan Duncan, ha presentado su dimisión por «motivos personales», según ha confirmado este lunes la Presidencia del país africano, menos de una semana después del fallecimiento del primer ministro Amadou Gon Coulibaly.
La Presidencia ha indicado en un comunicado que Duncan presentó su dimisión el 27 de febrero y que «tras muchas entrevistas, la última de ellas el 7 de julio», el mandatario, Alassane Ouattara, ha aceptado la decisión y ha puesto fin a sus funciones.
«El presidente de la República querría rendir homenaje a un gran servidor del Estado, un hombre de deber y compromiso», ha señalado, ates de resaltar que Duncan ha hecho «una importante contribución a la nación» en los cargos que ha ocupado.
Duncan accedió a la Vicepresidencia de Costa de Marfil en enero de 2017, tras ocupar el cargo de primer ministro entre noviembre de 2012 y ese mismo mes. Previamente, fue primer ministro entre 1993 y 1999.
Asimismo, fue ministro de Finanzas en los años noventa –con Ouattara como primer ministro– y posteriormente ocupó la cartera de Exteriores entre 2011 y 2012, ya con Ouattara en la Presidencia.
La dimisión de Duncan llega una semana después de la repentina muerte de Gon Coulibaly, quien era además candidato del gubernamental Agrupación de Houphouetistas por la Democracia y la Paz (RHDP) a las presidenciales de octubre, en las que Ouattara no podrá presentarse a un tercer mandato.
Sin embargo, la muerte de Gon Coulibaly ha llevado a la formación a apuntar que no puede descartarse que el presidente vuelva a presentarse a las elecciones, si bien Ouattara no se ha pronunciado formalmente al respecto. La Constitución marfileña contempla un límite de dos mandatos a la Presidencia.
Ouattara aseguró en marzo que no se presentará a la reelección, antes de expresar su deseo de «traspasar el poder a una nueva generación». Por contra, el director ejecutivo de la RHDP, Adama Bictogo, afirmó el viernes que ahora «la situación es diferente».
Los partidos de los ex presidentes Laurent Gbagbo y Henri Konan Bédié, principales rivales de Ouattara, anunciaron en mayo que aunaban esfuerzos de cara a la cita con las urnas.
El propio Gbagbo podría ser candidato después de su absolución en el Tribunal Penal Internacional (TPI) de los cargos que se le imputaban en relación con la escalada de violencia tras las elecciones de 2010, si bien está a la espera de la apelación presentada por la Fiscalía.
Muchos marfileños temen que otra polémica electoral pueda conducir a una nueva oleada de violencia como la registrada tras los comicios de 2010, cuando Gbagbo se negó a reconocer la victoria de Ouattara, que remachó una década turbulenta en la que Costa de Marfil tiró por tierra años de avance próspero y estable.