Destituido un militar argentino por defender a militares presos por delitos cometidos durante la dictadura
El ministro de Defensa, Jorge Taiana, ha destituido al general Rodrigo Alejandro Soloaga por hacer «apología del terrorismo de Estado» en unas declaraciones en las que reivindicó «a los camaradas que se encuentran privados de su libertad» por los juicios de lesa humanidad contra la dictadura.
Taiana considera que el militar incurrió en «apología del terrorismo de Estado», en «un discurso contrario a todos los principios democráticos de un estado de derecho», ha informado el Ministerio de Defensa.
«A 40 años de la recuperación de la democracia, es inaceptable y no toleraremos bajo ninguna circunstancia este tipo de manifestaciones y les cabrá la sanción disciplinaria correspondiente a quienes tengan estos pronunciamientos que atentan contra la democracia y las políticas de memoria, verdad y justicia», ha argumentado.
Soloaga presidía la Comisión de Retirados del Arma de Caballería cuando expresó el pasado martes su acompañamiento y respaldo a los militares detenidos por causas de lesa humanidad y les agradeció por enfrentar «con estoicismo» su encarcelamiento. El acto fue realizado en instalaciones de la Dirección de Remonta y Veterinaria del Ejército.
El ya exmilitar recordó concretamente «a todos los camaradas de Caballería que se encuentran privados de su libertad, como consecuencia de haber cumplido funciones en las filas de la fuerza durante una difícil época para nuestro país y expresarles nuestro permanente y renovado acompañamiento en estas circunstancias que les toca enfrentar y que llevan con estoicismo», según recoge la agencia de noticias argentina Télam.
Soloaga fue jefe de Personal del Ejército y veterano de la guerra de las Malvinas. Fue uno de los primeros oficiales de la fuerza que pidió el pase a retiro en marzo de 2004, pocas horas después de que el entonces presidente Néstor Kirchner ordenar al jefe del Ejército, general Roberto Bendini, descolgar de una galería del Colegio Militar los cuadros de los dictadores Jorge Rafael Videla y Reynaldo Benito Bignone.
La destitución se basa en el expediente abierto por el director de Derechos Humanos de Defensa, Eduardo Jozami, por incumplir el Artículo 1° del Código de Disciplina Militar, que obliga a todo uniformado ajustar su conducta al cumplimiento estricto de la Constitución y las demás leyes de la República, «así como la observancia cabal de las leyes y reglamentos militares, el respeto a las órdenes del mando, la subordinación al régimen jerárquico y el cumplimiento de todas las obligaciones que surgen del estado militar».