De Cos llama a implementar las reformas globalmente acordadas de Basilea III sin desviaciones
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha advertido del riesgo de que jurisdicciones o bancos aborden la implementación de las reformas de Basilea III con un enfoque diferente al globalmente acordado y ha instado a que la Unión Europea «demuestre su compromiso con el multilateralismo y adopte las decisiones acordadas a nivel mundial».
En su intervención en el panel sobre la implementación de Basilea III en la Unión Europea organizado por Eurofi en Liubliana, Hernández de Cos ha recordado que, tras la crisis financiera global, el Comité de Basilea emprendió una serie de reformas para abordar los fallos regulatorios en el sistema bancario, cuyos beneficios fueron «claros» durante la pandemia del coronavirus y evitaron que la banca recortase drásticamente la concesión de crédito o viese comprometida su resiliencia.
Sin embargo, el gobernador del Banco de España ha alertado de que el trabajo para salvaguardar la estabilidad financiera global «está lejos de haber terminado», pues las reformas más destacadas de Basilea III tienen como objetivo abordar las importantes deficiencias del sistema bancario mundial, pero abordar esas deficiencias «sigue siendo tan importante hoy como lo fue antes de la pandemia».
En esta línea, ha señalado que el principal objetivo de las reformas es restaurar la credibilidad en el marco de capital ponderado por riesgo, lo que requiere de una reducción de la variabilidad excesiva en los modelos internos de los bancos y desarrollar enfoques estandarizados sólidos sensibles al riesgo.
Las vulnerabilidades que provocan estas dispersiones no se han manifestado durante la pandemia debido a la naturaleza exógena de la crisis, pero Hernández de Cos ha advertido de que, de no abordarse, el sistema bancario presentará deficiencias materiales en futuras crisis financieras.
En este escenario, el gobernador del Banco de España ha incidido en el debate sobre cómo implementar Basilea III en la Unión Europea en la coyuntura actual. Las reformas finalizaron en 2017 y su fecha de implementación globalmente acordada es el 1 de enero de 2023.
«Los líderes del G20 han pedido repetidamente su implementación completa, oportuna y coherente. Ha llegado el momento de actuar», ha reclamado Hernández de Cos, quien ha advertido de que los beneficios que estas reformas tendrán en la economía pueden verse «significativamente diluidos» si las jurisdicciones se desvían de lo acordado globalmente en su implementación.
En este sentido, el gobernador ha recordado que las reformas fueron sometidas a un extenso proceso de consulta a las partes interesadas que duró casi tres años, por lo que considera que las normas que se acordaron a nivel mundial «ya son un compromiso por su propia naturaleza y reflejan las diferentes opiniones de los miembros del Comité y las partes interesadas externas».
Hernández de Cos ha recalcado que la estabilidad financiera es «un bien público mundial» que no entiende de fronteras geográficas, por lo que las reformas de Basilea III deben implementarse a nivel global.
«Para ser claros: la transposición nacional y democrática de las normas mundiales es un proceso muy importante y que debe respetarse plenamente. Pero ahora la atención debería centrarse principalmente en el lado de la acción, lo que significa demostrar el compromiso de la UE con el multilateralismo y las decisiones acordadas a nivel mundial, respaldadas por el grupo de gobernadores y jefes de supervisión y con las que los líderes del G20 se han comprometido repetidamente a implementar de manera completa, oportuna y coherente», ha apostillado De Cos.