Díaz dice que estaba dispuesta a subir menos el SMI para sumar a la CEOE: «A veces no negociando se pierde»
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 17
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha remarcado su «satisfacción» por el acuerdo suscrito con los sindicatos para el alza del salario mínimo interprofesional (SMI), al tiempo que ha recordado que hay reformas de calado pendientes y ha hecho un llamamiento a la patronal española para que se «resitúe» porque «a veces no negociando se pierde».
«No sé si hablo claro, no negociando se pierde. Ustedes saben que la ministra de Trabajo estuvo dispuesta a pactar por una cuantía inferior a la que hoy tenemos. A veces no pactando se pierde», ha argumentado.
Díaz, que ya había expresado su satisfacción por la subida del SMI en un acto previo de su agenda en Compostela, ha reiterado que celebra un el acuerdo suscrito con los sindicatos y que se traduce en un alza hasta alcanzar los 965 euros desde el 1 de septiembre.
La patronal se ha descolgado del acuerdo y este viernes el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado que se trata de una decisión que «ya estaba tomada», formulada «en clave política y no de un planteamiento serio».
Tras reunirse con el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, preguntada por la postura de la CEOE, Díaz ha reivindicado el alza y ha proclamado su convicción de que «la principal herramienta para evitar la pobreza laboral se llama SMI». «He trabajado con discreción y con mucho tesón para que millón y medio de trabajadores, fundamentalmente jóvenes y mujeres, hoy sepan que su vida va a mejorar un poquito más», ha esgrimido.
De hecho, ha esgrimido que esta subida va a llegar «a barrios, peluquerías, bares y pequeñas tiendas» y ha ratificado el compromiso de que el Gobierno cumplirá con la promesa de que el SMI alcance el 60% del salario medio «según el mandato de la Carta Social europea».
«HUBO DIÁLOGO SOCIAL»
Más allá, ha defendido que, con independencia del resultado, en la negociación de la subida del SMI «hubo diálogo social». «Y quiero dar las gracias a todos por estar en las mesas», ha dicho, a quienes firmaron finalmente y a los que no. «Nunca planteo las negociaciones como una derrota», ha apostillado.
Dicho esto y dado que el objetivo del Gobierno es «emprender grandes reformas», Díaz ha manifestado su convicción de que la patronal, «como lo ha hecho siempre», estará «a la altura de las circunstancias». A modo de ejemplo, se ha referido a negociaciones abiertas como la de los ERTE, cuya mesa se reunió, ha subrayado, en la pasada jornada.
De hecho, ha aprovechado su intervención para ratificar que se van a prorrogar los ERTE (aunque no ha concretado condiciones y horizonte) y el Gobierno «seguirá protegiendo a empresas y trabajadores sin ninguna duda».
«LA PATRONAL NO NEGOCIÓ»
Más allá, ha indicado que la patronal ya estuvo en otras negociaciones y no siempre acabó suscribiendo los acuerdos. Eso sí, ha reconocido que lo que le «apena» y así –ha afirmado– se lo ha trasladado al presidente de los empresarios es que la patronal «no negoció», sino que «entraron en la mesa diciendo que querían cero y han salido con cero».
«Yo negocio y los sindicatos también. Se va a las mesas sin líneas rojas y sabiendo que se tiene que ceder», ha contrapuesto, antes de insistir en que la CEOE «no negoció».
En todo caso, ha insistido en que, de cara a futuras negociaciones, la patronal «estará a la altura» del país. Y a renglón seguido le ha hecho un llamamiento a que se «resitúe», con un aviso: «A veces no negociando se pierde».
FEIJÓO PREFERIRÍA CONTROLAR LA TARIFA ELÉCTRICA
En la comparecencia conjunta posterior al encuentro también ha sido preguntado sobre el alza del SMI el presidente gallego, quien ha advertido de que en el caso de la comunidad no se le pueden «cerrar las fábricas» porque, si esto ocurre, y hay parados, ha subrayado, «para qué subir el SMI, no es ninguna solución».
Tras manifestar sus «dudas» acerca de que la medida vaya a mejorar la competitividad de la economía en el país, ha esgrimido que entre la medida pactada o «controlar el precio energético», él se quedaría con la segunda opción, porque así no se incrementarían los gastos «y se mantendría mayor competitividad» de la economía.
Feijóo tampoco ha profundizado más en su reflexión sobre esta cuestión que, ha recalcado, no estuvo en la agenda de su encuentro con Díaz. «Yo no formo parte del diálogo social y ella es una experta», ha zanjado el mandatario autonómico.