Cruz Roja ha atendido este verano en las playas de Cantabria más de 4.400 picaduras por medusas
Cruz Roja ha atendido este verano en las playas de Cantabria donde ha prestado servicio más de 4.400 picaduras o alergias provocadas por el contacto con medusas y picaduras de peces escorpión, lo que ha elevado un 40 por ciento las asistencias sanitarias respecto a 2022.
Sin embargo, los rescates han descendido un 25 por ciento respecto al año anterior, según ha dado a conocer en una nota de prensa la entidad tras finalizar la temporada, que empezó el 3 de junio y en la que ha atendido a más de 7.500 personas en total (7.574).
Durante este tiempo, los servicios de socorrismo de Cruz Roja han estado presentes en 14 municipios de la región con 65 puestos de asistencia.
Al frente del servicio han estado 280 personas, entre socorristasacuáticos, técnicos sanitarios, patrones de embarcación, facultativos y personal de enfermería.
Del total de asistencias, que se incrementaron un 32 por ciento respecto a 2022, 187 fueron rescates; 172 evacuaciones a centros hospitalarios; 260 por baño asistido para personas con discapacidad (en las playas de Trengandín, Noja; La Salvé, Laredo; y Los Peligros, Santander) y 103 por niños extraviados.
Para el director de Socorros de Cruz Roja Cantabria, Agustín Salán, ha desatacado como dato «muy positivo» el descenso de los rescates, «una señal de que la cultura preventiva en la que tanto trabajamos da sus frutos», ha indicado.
Desde la organización han destacado también la importante labor de concienciación que realiza el personal de playas con mensajes preventivos para evitar golpes de calor, cortes de digestión o lesiones por animales marinos, de los que en Cantabria se han lanzado más de 85.000.
En cuanto a los datos nacionales, este verano Cruz Roja ha atendido a más de 39.000 personas en los 229 los lugares en los que ha prestado servicio con 144 puestos de asistencia en total.