Confirman la seguridad y eficacia de una polipíldora para la hipertensión con cuatro fármacos

Investigadores del Centro de Investigación Aplicada Westmead de la Universidad de Sydney (Australia) han confirmado que es segura e incluso más eficaz para controlar la presión arterial, el tratamiento con una píldora que contiene cuatro medicamentos, cada uno en una cuarta parte de su dosis habitual, en comparación con la práctica común de la monoterapia, en la que el tratamiento comienza con solo fármaco.

Según los datos dados a conocer en The Lancet , y presentado en la conferencia de la Sociedad Europea de Cardiología en el Congreso ESC 2021, este primer ensayo clínico controlado aleatorio a gran escala para comenzar con esta nueva combinación de medicamentos para la presión arterial, controló la presión arterial en el 80 por ciento de los participantes en 12 semanas, en comparación con el 60 por ciento en el grupo de control que, sin embargo, tuvo acceso a la mejor atención del paciente.

La presión arterial alta es la principal causa de muerte en el mundo, pero los índices deficientes de control de la presión arterial siguen siendo comunes. Tradicionalmente, los médicos comenzaban con un medicamento y luego hacían un seguimiento para considerar agregar o cambiar el tratamiento, pero esta estrategia a menudo no tiene éxito en la práctica y las tasas de control de la presión arterial se han mantenido bajas durante décadas.

«Las estadísticas sobre la carga mundial de la presión arterial alta de esta semana muestran que se ha duplicado en los últimos 30 años los casos de hipertensión, la principal causa del principal asesino del mundo: ataque cardíaco y accidente cerebrovascular», ha señalado la profesora Clara Chow, autora principal y directora del Centro de Investigación Aplicada Westmead de la Universidad de Sydney.

«Se espera que la reducción de la presión arterial con esta estrategia reduzca el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares en aproximadamente un 20 por ciento. En entornos con poco o ningún tratamiento para la hipertensión existente, los beneficios serían mucho mayores», ha añadido la doctora Emily Atkins del Instituto George para la Salud Global, UNSW Sydney y la Universidad de Sydney.

TRATAMIENTO CUÁDRUPLE DE DOSIS BAJAS

El ensayo clínico australiano multicéntrico de una posible dosis futura de cuádruple de cuatro medicamentos, denominado tratamiento cuádruple de dosis bajas de UltrA para la hipertensión (CUARTET), ha demostrado que una sola pastilla que contiene una combinación cuádruple ultrabaja es mucho más eficaz que el enfoque tradicional de comenzar con monoterapia.

El estudio financiado por el Consejo Nacional de Investigación Médica y de Salud inscribió a 591 participantes con presión arterial alta sin tratamiento o en terapia única en 10 centros en Australia. El resultado primario fue la presión arterial significativamente reducida, en el grupo que comenzó con la cuádruple, a las 12 semanas. Estas diferencias se mantuvieron, con el control de la presión arterial aún mejor con el método de la píldora cuádruple en comparación con el método estándar a los 12 meses, y sin diferencias en los efectos secundarios.

«Nuestro ensayo ha demostrado de manera abrumadora la eficacia, tolerabilidad y seguridad de esta estrategia de combinación de dosis ultrabajas, una estrategia de manejo de la hipertensión potencialmente simple y escalable para tratar la hipertensión», ha señalado el autor principal, el profesor Anthony Rodgers de The George Institute, UNSW Sydney e Imperial College London.

El profesor Chow ha explicado que el estudio se basó en su estudio anterior que comparaba un enfoque de cuádruple píldora con el placebo. «Nuestro objetivo era probar esta nueva estrategia de cuádruples con la atención habitual en Australia; como se ve a menudo en los ensayos clínicos, las personas del grupo de comparación recibieron un tratamiento mucho mejor que el promedio. No obstante, nuestra nueva estrategia de cuádruples fue mucho mejor», ha señalado.

«Este fue el primer estudio que demostró que los beneficios se mantienen a largo plazo sin ninguna reducción con el tiempo. Aunque se usaron muchos más medicamentos complementarios para la presión arterial en el grupo de comparación durante el seguimiento, nunca alcanzaron al grupo de cuádruples», añade.