Condenados a uno y dos años de prisión por agredir a otro hombre en las fiestas de Cicero
Se les aplica las atenuantes de reparación del daño y dilaciones indebidas, dado que los hechos tuvieron lugar en 2018
La Audiencia Provincial de Cantabria ha condenado a un año y a dos años de prisión a dos hombres que agredieron a otro en las fiestas patronales de Cicero en junio de 2018.
El juicio estaba señalado en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial esta mañana, pero al inicio del mismo la Fiscalía ha informado de que había alcanzado un acuerdo con las partes.
Inicialmente se solicitaba para los acusados penas de cuatro años y medio y cinco años y tres meses de cárcel, respectivamente, pero tras consignar ambos 1.600 euros hace dos días para pagar las posibles responsabilidades en que pudieran haber incurrido, el ministerio público considera que concurre la circunstancia atenuante de reparación del daño. También se ha aplicado la atenuante de dilaciones indebidas, pues los hechos tuvieron lugar hace siete años.
Los acusados los han reconocido y han admitido ser autores de un delito de lesiones con deformidad. Además de la pena de prisión, se les ha impuesto el pago de una indemnización de 2.600 euros, por las lesiones y secuelas que le han quedado al agredido. Este, a su vez, ha sido condenado como autor de un delito de lesiones leves a 50 euros de multa.
HECHOS PROBADOS
Según los hechos probados que se recogerán en la sentencia, los tres se encontraban en las fiestas patronales de Cicero dentro del recinto de las ferias cuando dos de ellos, que iban juntos, al percatarse de la presencia del tercero, «permanecieron unos minutos mirándole fijamente y de forma desafiante».
A continuación, se acercaron a él para iniciar una pelea «con ánimo de menoscabar su integridad física» y «actuando de consuno». Cuando le alcanzaron le preguntaron si era él, y a su respuesta afirmativa uno de ellos le propinó un «fuerte puñetazo» en la cara que le desestabilizó, lo que provocó que cayera al suelo, donde continuó dándole «numerosos puñetazos».
Cuando estaban ambos en el suelo, el agredido, «en respuesta ante la súbita agresión y con ánimo de defenderse, pero de forma violenta y desproporcionada, golpeó fuertemente con sus puños al otro, en su cara, tronco y espalda».
Ante esto, intervino el amigo del primero, que se encontraba de pie, propinando «varias patadas en la cara y boca» al otro, fracturándole cinco dientes y quedando tendido en el suelo semiinconsciente.
Como consecuencia de estos hechos, el que fue acometido por los otros dos sufrió lesiones en la boca, con rotura parcial de cinco dientes, contusiones en la espalda y también en las manos y rodillas. Y el otro, sufrió policontusiones en la frente, ojo, espalda y codo.



