Conceden la Medalla de Oro al policía de Andújar (Jaén) fallecido por un disparo tras intervenir en una reyerta vecinal
La Dirección General de la Policía, dependiente del Ministerio del Interior, ha concedido la Medalla de Oro a título póstumo al policía que falleció este domingo en Andújar (Jaén) tras recibir un disparo en una reyerta en la que un vecino fue abatido tras herir a otro agente al que había atacado con un cuchillo y un martillo.
Fuentes del Ministerio del Interior han confirmado a Europa Press la decisión de conceder la distinción a título póstumo a Juan José L.E, agente de la Policía Nacional de 40 años de edad, que este lunes ha sido homenajeado por sus compañeros con un minuto de silencio.
El incidente se produjo sobre las 10.00 horas de este domingo, cuando se alertó de una riña entre dos vecinos en la calle Las Monjas de Andújar, donde uno de ellos estaba dando martillazos en la puerta de otro en actitud agresiva.
En un primer momento se informó de que Juanjo, el agente fallecido, fue herido con un arma blanca en el forcejeo con este vecino, si bien la investigación posterior apunta a que el motivo fue que recibió un disparo. El agresor, que blandía un cuchillo y un martillo, también fue abatido por un policía tras huir de la zona a pie unos metros.
INVESTIGACIÓN ABIERTA
El incidente, que fue grabado por los vecinos con sus teléfonos móviles, ha derivado en una investigación, a la espera del informe de la autopsia y de balística. En concreto, se trata de determinar si el agente falleció por un disparo del compañero que forcejeaba con el agresor o si murió fortuitamente al extraer su pistola y dispararse con su propia arma.
La tercera opción, según fuentes de la investigación consultadas por Europa Press, es que el disparo procediera de los agentes de la Policía Local que acudieron al lugar a prestar ayuda.
Las imágenes de los vecinos muestran que un primer agente, el copiloto del coche patrulla, se bajó del vehículo oficial y el agresor se digirió rápidamente hacia él. El policía reaccionó desenfundado su arma, sin disparar en un primer momento mientras reculaba caminando hacia atrás para, posteriormente, echar mano de su porra extensible.
En ese momento, el agresor se abalanzó sobre él y lo tiró al suelo, momento en el que se puede escuchar un primer disparo. Mientras el agresor y policía forcejean en el suelo, un segundo agente –el conductor– se acercó a pie y recibió un disparo. Es este último el que presentaba una parada cardiorrespiratoria y, pese a las maniobras de reanimación y su traslado a un hospital, falleció poco después.
ACTOS DE HOMENAJE Y CRÍTICAS DE SINDICATOS
La ceremonia de jura o promesa de comisarios principales celebrada este lunes bajo la presidencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha concluido con un minuto de silencio en recuerdo al agente que falleció en acto de servicio.
En paralelo, los sindicatos de la Policía Nacional han convocado un minuto de silencio por la muerte de su compañero, reclamando al Ministerio del Interior que se actualice la formación que reciben en el uso de armas y se dé más «seguridad jurídica y protocolos claros» a los agentes que participan en este tipo de intervenciones.
También han solicitado el reconocimiento como «profesión de riesgo» y que se mejore su dotación de medios, en alusión al uso de forma generalizada de chalecos antibala y la disponibilidad de pistolas eléctricas inmovilizantes tipo Táser.
