Las pernoctaciones en hoteles cántabros caen un 5% en marzo

SANTANDER, 23

Las pernoctaciones en hoteles cántabros han caído un 5% en marzo, en comparación con el mismo mes de 2018, frente al 1,8% que han retrocedido en el conjunto del país, como también ha disminuido el grado de ocupación por plazas, casi un -1,6% en el interanual.

Así lo publica hoy el Instituto Cántabro de Estadística (ICANE), con datos remitidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Según los mismos, las pernoctaciones hoteleras retrocedieron un -5,09% en marzo en Cantabria en comparación con el mismo mes del año anterior, hasta alcanzar las 154.087. La mayoría de estas estancias fueron generadas por turistas residentes en España, en concreto 130.909, que suponen el 85%, mientras que las 23.177 restantes (el 15%) correspondieron a extranjeros.

El incremento de las pernoctaciones de personas procedentes de otros países en establecimientos de la comunidad fue del 14,18%, mientras que las de los viajeros nacionales cayeron un -7,8%.

En los hoteles cántabros se alojaron en el tercer mes del año 77.852 personas, la mayoría, de nuevo, del país, en concreto 68.210, el 87,6%, y el 12,4% restante de otros estados, que sumaron 9.642.

Así, el número de turistas bajó en marzo un -2% en Cantabria en términos interanuales, liderado por el recorte de extranjeros (-5,2%), mientras los españoles fueron un -1,6% menos que en el tercer mes de 2018.

La estancia media fue de 1,98 días, que representa un -2,9% menos que en el mismo mes de 2018. También fueron menos los establecimientos abiertos, 275, (-1%) y las plazas ofertadas (-1,3%), un total de 13.437.

El grado de ocupación de las mismas fue menor, un -1,6%, hasta alcanzar el 36,4%, aunque los fines de semana creció un 5,9%, hasta una tasa del 51,9%.

Frente a esta menor actividad, el personal empleado en marzo en el sector retrocedió ligeramente (-0,18%), hasta los 1.679 puestos de trabajo.

Finalmente, los precios hoteleros disminuyeron un 7,36% con respecto al mismo mes del año anterior, más que en el conjunto de España, donde el recorte fue el -1,2%.

La tarifa media diaria bajó un -2,04%, mientras que el ingreso por habitación disponible aumentó un 4%. En España, la tarifa media diaria disminuyó un -1% y el ingreso por habitación disponible creció un 1,16%.