Colombia afirma que el «reto» en la frontera es el «apoyo de Venezuela» a grupos ilegales
El ministro de Defensa de Colombia, Diego Molano, ha asegurado este martes que el «reto» de las autoridades colombianas en la frontera es el «apoyo de Venezuela» a grupos ilegales, en el marco de la escalada de violencia registrada en el departamento de Arauca, fronterizo con el país caribeño.
Según ha explicado Molano, el origen de la violencia se encuentra en una «disputa» registrada en territorio venezolano entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las disidencias de las ya extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por el uso de pistas clandestinas para el narcotráfico.
«Sin embargo, hasta que no termine la investigación, no se podrá dar certeza de quienes participaron», ha enfatizado Molano, que ha incidido en que en la frontera con Venezuela operan tres grupos armados, entre ellos el ELN.
El ministro ha explicado que el Gobierno pretende «desmantelar» el negocio del narcotráfico y ha insistido en que el Ejecutivo de Iván Duque se dirige contra los grupos armados ilegales. «Es importante el despliegue contra estas estructuras que operan, el gran reto es el control del paso de la frontera», ha insistido.
En respuesta a los incidentes en Arauca, Duque ha ordenado el desplazamiento de miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía de Colombia al departamento. «Enviaremos dos batallones, aumentaremos la capacidad de inteligencia y supervisión helicoptada y aerotransportada para garantizar le control territorial», ha apuntado.
Mientras, el Ejército de Venezuela elevó su «nivel de alerta» en los municipios fronterizos con Colombia este martes, ante la escalada de violencia en Arauca, que ya ha dejado al menos una veintena de muertos por los enfrentamientos entre el ELN y las disidencias de las FARC.
Duque ya lamentó el martes que los grupos violentos hayan tenido «protección y resguardo» por parte del Gobierno venezolano, y el ministro de Defensa venezolano, Vladimir Padrino, calificó al presidente colombiano como «el peor presidente de Colombia» y le acusó de «crear fuerzas de élite, enviar batallones y ordenar operaciones mientras emite un panfletario informe para disfrazar una realidad que se hace palpable en Arauca».