Clavijo cierra la puerta a la extracción de tierras raras en Fuerteventura: «No va a ocurrir»
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 25
El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha vuelto a rechazar este martes la extracción de tierras raras en la isla de Fuerteventura dado que el Ejecutivo toma decisiones en «consenso» con la sociedad de la isla.
En respuesta a una pregunta de Vox en la sesión de control del Pleno del Parlamento ha dejado claro que ni siquiera se va a realizar una investigación, tal y como solicita la formación conservadora, por lo que ha espetado al portavoz, Nicasio Galván, que se olvide de «quedar bien» con Donald Trump y Santiago Abascal y les diga que no pueden venir a «desvalijar todas las materias primas y las riquezas de Canarias».
«Para eso está este Gobierno de Canarias y espero que este Parlamento», ha señalado.
El presidente se ha mostrado abierto a «diversificar» la economía canaria a través de la industria de microchips y semiconductores, con una estrategia vinculada a la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, subrayando que «diversificar la economía no es establecer una cantera en Fuerteventura».
Además ha afeado a Galván que trate a los canarios como «ignorantes» dado que si se encuentran yacimientos de tierras raras «no va a ser un metro cuadrado» lo que se remueva en la isla. «No somos tontos», ha indicado.
Galván ha criticado a Clavijo porque «pone la mano suplicando subvenciones» ante la UE ya que «vende a los canarios como pobrecitos» cuando al mismo tiempo «niega la posibilidad de diversificar» la economía con una investigación sobre las tierras raras.
En esa línea ha cuestionado la «hipocresía» de comprar tierras raras a China donde no se respetan los derechos laborales ni ambientales y entiende que el caso de Fuerteventura es el «típico ejemplo» de un problema «creado por políticos» que «manipulan a la sociedad civil».
Ha dicho que la investigación «es un paso más» que implica solo «mover un metro cuadrado de tierra» por lo que ahora «le toca el turno a los políticos y la empresa privada».
Además ha retado al presidente a que le explique a la UE y el resto del mundo cuál es su postura y qué «seguridad jurídica» se logra revocando permisos a las empresas. «Es un buen mensaje para atraer inversión extranjera», ha ironizado.