La venta de muebles en España cayó en 2020 por primera vez en seis años, hasta 1.365 millones

La venta de muebles en España cayó durante 2020 por primera vez en seis años, lo que supone una disminución del 14% en el valor de este mercado, hasta los 1.365 millones de euros según ha informado el Observatorio Sectorial DBK de Informa, filial de CESCE.

Entre marzo y junio del año pasado, el sector se vio muy penalizado por el cese de la actividad comercial de bienes no esenciales y la limitación de la libertad de circulación decretados para hacer frente a la pandemia de la Covid-19. Tras este período, el incremento de la demanda de algunos productos no fue suficiente para revertir la caída del negocio registrada en el primer semestre.

Las exportaciones se redujeron un 17%, situándose en 465 millones de euros los ingresos obtenidos de este modo. Francia, Portugal y Estados Unidos fueron los principales compradores extranjeros, reuniendo el 48% del total. A pesar de esto, las ventas españolas disminuyeron en Reino Unido un 30,5%, en Italia un 29,3% y en Estados Unidos un 28,6%.

Las importaciones se cifraron en 690 millones de euros, un 14% menos interanual. La mayoría de importaciones llegaron de la Unión Europea, siendo estas el 46% del total y superando así a China como principal suministrador del mercado español. Italia, Francia y Polonia fueron los principales proveedores comunitarios. No obstante, China continuó incrementando su participación en el conjunto de las importaciones españolas.

Las ventas de producción nacional se situaron en 1.140 millones de euros, lo que supone un 16% menos que en 2019. En enero de 2020, operaban en el mercado español 11.427 empresas dedicadas a la fabricación de muebles, un 4,4% menos que las registradas en el ejercicio anterior. Esta cifra responde a la tendencia a la baja en el número de empresas que se ha venido registrando en los últimos años.

La mayoría de las empresas fabricantes son de tamaño reducido. Casi el 90% de ellas cuenta con menos de diez trabajadores, mientras que tan solo el 1,4% emplea a más de 50 personas. Durante el último año, el descenso en el número de empresas se concentró en las compañías sin asalariados, que sufrieron una reducción del 6,9% y en menor medida entre aquellas que cuentan con entre uno y nueve empleados.

El grado de concentración de la oferta continúa aumentando. Las cinco primeras empresas del sector en términos de facturación total reunieron en 2019 una cuota de producción conjunta del 14%, participación que aumentó hasta el 23% al considerar a las diez primeras.

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