CC.OO. amenaza con movilizaciones en el transporte por carretera frente a Gobierno y empresas
Teme que las presiones de la patronal sobre el Gobierno solo consigan abaratar el combustible y rebajar impuestos a las empresas
CC.OO. ha advertido de que llevará a cabo movilizaciones entre los trabajadores del sector del transporte de mercancías por carretera si el Gobierno y la patronal, que ha convocado un paro de tres días en diciembre por su cuenta, rechazan sentarse con los sindicatos.
«Tenemos claro que nuestros principales problemas son laborales y consecuencia de las prácticas empresariales de las últimas décadas. Por ello, es inviable secundar una movilización con los responsables de esta situación y sus recetas. Venimos insistiendo en que los problemas del sector son problemas sociales y deben ser abordados en una mesa social tripartita», explica Comisiones Obreras.
El sindicato teme que las presiones realizadas desde la patronal al Gobierno solo consigan abaratar el combustible y rebajar impuestos a las empresas, algo que no solucionaría el problema laboral y social que consideran que prima actualmente sobre el sector.
En concreto, denuncian que el salario de los camioneros es peor ahora que el que recibían hasta 30 años y que, proporcionalmente a las horas, ronda el SMI; que no se cumplen los convenio colectivos; el fraude a la Seguridad Social al camuflarse en forma de dietas parte de la retribución, o la falta de relevo generacional.
Así, reivindican el cumplimiento de las horas de descanso, acabar con la penosidad y peligrosidad de la profesión, que se disponga de áreas de servicio seguras, el reconocimiento de enfermedades profesionales, la eliminación de la competencia desleal o prohibir que la carga y descarga la puedan hacer los camioneros.
Fuentes del Ministerio explican a Europa Press que la ley ya deja claro que los camioneros no tienen que hacer la carga y descarga, si bien sí deja la puerta abierta a que se negocie entre las partes. Por ello, en búsqueda de una ventaja competitiva de unas empresas de transportes frente a otras, para conseguir el contrato los transportistas cierran acuerdos con los cargadores que establecen que el camionero realice esta carga y descarga.
Algo parecido ocurre con los carburantes. Los transportistas pueden establecer una cláusula de revisión de precios pero suelen renunciar a ella para ganar una ventaja competitiva, por lo que acaban ellos asumiendo la gran subida que está experimentando el diésel.
POCA CAPACIDAD DE NEGOCIACIÓN
En declaraciones a Europa Press, Javier Escribano, cofundador de Ontruck, una agencia de transportes digital que conecta a transportistas con cargadores, explica que son muchos los factores de incertidumbre en el sector, como el 40% de kilómetros que se hacen de media en España con los camiones vacíos, las esperas en los almacenes, las condiciones sobre la carga y descarga o la excesiva media de pago de 90 días en el sector, entre otros muchos.
El principal problema es que el sector está muy atomizado, con muchos autónomos y pymes sin capacidad de negociación sobre estos asuntos. Como ejemplo, empresas grandes como Ontruck permiten reducir al 10% los kilómetros en vacío, negociar los precios para paliar el efecto de la gasolina o reducir a 30 días el periodo de pago, según defiende la compañía.
La capacidad de negociación también permite empezar a cobrar a los cargadores por más de 30 minutos de espera, que en el fondo este retraso le hace perder dinero al transportista, o cobrarles en caso de que sea el camionero el que realice la carga. Esta última práctica se ha generalizado en los almacenes para ahorrar costes en la contratación de mozos de carga, asumiendo esta actividad, en su defecto, el camionero.