Casado avisa a Sánchez y PNV que usará el recurso previo de inconstitucionalidad si hay reformas contra unidad nacional

Se marca como retos aglutinar el centro-derecha, frenar el «cantonalismo» y combatir el «populismo» que ya «afecta al PSOE»

El líder del PP, Pablo Casado, ha advertido este lunes al jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, y al PNV que su partido está dispuesto a usar el recurso previo de inconstitucionalidad para frenar cualquier reforma de la Constitución o de los Estatutos de Autonomía que vulneren la unidad nacional.

Así se ha pronunciado después de que el acuerdo alcanzado entre el PSOE y el PNV para permitir la investidura de Pedro Sánchez incluya el compromiso de «impulsar» las reformas necesarias para «adecuar la estructura del Estado al reconocimiento de las identidades territoriales», lo que debe alcanzarse a través del «diálogo entre partidos e instituciones».

Así reza el punto 4 del acuerdo firmado este lunes en el Congreso de los Diputados por los líderes de los dos partidos, Pedro Sánchez y Andoni Ortuzar, respectivamente, y que se ha hecho público posteriormente.

Casado ha criticado que Sánchez se comprometa con el PNV a «a adecuar la estructura del Estado al reconocimiento de distintas naciones». «No vamos a permitir reformas constitucionales ni estatutarias que vulneren la unidad nacional, acudiendo al recurso previo de inconstitucionalidad», ha avisado en un mensaje en su cuenta de Twitter, que ha recogido Europa Press.

EL PP, «MURALLA PARA DEFENDER LA CONSTITUCIÓN»

Este mediodía, en una rueda de prensa en la sede del partido para hacer balance del año, el líder del PP ya ha aludido a ese acuerdo con el PNV al recalcar que su formación será «muralla para defender la Constitución, los Estatutos y la legalidad en vigor».

En este punto, Casado ha puesto en valor la «coherencia» de su partido, que está «fuerte, unido y listo para gobernar» de nuevo, y se ha comprometido a actuar ante «cualquier actuación lesiva» que pueda acometer el Gobierno de coalición formado por Sánchez y Pablo Iglesias con sus socios independentistas y nacionalistas.

En esa comparecencia pública, Casado se ha fijado además «tres retos» que hay por delante en esta nueva legislatura. En primer lugar ha señalado que «la división de la derecha» ha permitido que la izquierda ahora pueda gobernar y ha sido «muy perjudicial para los intereses de los españoles». Aunque ha dicho que no fue posible España Suma con Ciudadanos, ha subrayado que ese proyecto sigue vivo.

Como segundo reto ha citado la «cantonalización» de la política española y ha criticado que se pretenda abrir el «proceso estatutario de creación de autonomías 40 años después». «Algunos se lo tienen que hacer mirar», ha dicho, Casado en referencia a que el PSOE secunde que León se separe de Castilla y León. En este punto, ha subrayado que el PP actuará con contundencia contra cualquier concejal que «ponga en jaque una historia de éxito, aunque sea por error».

En tercer lugar, el líder del PP ha citado el «populismo» que, según ha dicho, ya no afecta solo a los nuevos partidos sino que «ha afectado de lleno al PSOE» con «soluciones fáciles a problemas complejos y entrar en el zoco de la negociación con cuestiones que antes nadie osaba a poner en cuestión».

Por eso, Casado ha dicho que hoy «más que nunca es necesaria la política seria, serena y moderada», que se centre en las «preocupaciones de los españoles». «El PP va a estar a la altura de las circunstancias e incluso tendiendo la mano al Gobierno que pueda formar el PSOE», ha dicho, para reiterar su oferta para llegar a acuerdos de Estado con el objetivo de que el Gobierno no «caiga en manos de los radicales».