Carmena cree «un virus de la democracia» el diálogo «barriobajero y agresivo» en el que a veces se mueve la política

Considera que los partidos políticos deben transformarse y dejar de ser «núcleos rígidos»

ZARAGOZA, 3

La abogada laborista, jueza emérita y exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, autora del recién publicado libro La joven política , ha pedido erradicar el diálogo «grotesco, barriobajero, descortés y agresivo» entorno al que, a veces, se mueve la política, que ha considerado «un virus de la democracia» y «que hace que resulte difícil conseguir que sea instrumento para la mejora de la sociedad».

En declaraciones a los medios de comunicación, con motivo de su participación en la primera sesión del ciclo El tiempo de las mujeres , organizado por el vicerrectorado de Cultura y Proyección Social de la Universidad de Zaragoza, se ha preguntado en qué actividad de la vida social «tiene sentido que el diálogo que se utiliza para el intercambio de unas opiniones tenga esas características».

Según ha dicho, «nada podría funcionar, si constantemente nos estuviéramos insultando, como se hace en la política; es algo que hay que erradicar», más cuando es una actividad que necesita «de tanta racionalidad, escucha y análisis conjunto». Carmena ha esgrimido que todos los son demócratas han recordar «que a la democracia, lo mismo que a la vida, se la cuida».

La exalcaldesa de Madrid se ha mostrado poco partidaria de usar etiquetas, como hablar de la izquierda, y ha propuesto «guardarlas en una caja y hablar de las cuestiones importantes, sin tener en cuenta si esto lo ha dicho alguien que tiene la etiqueta A o B».

Sí ha considerado que se puede hablar de la existencia «de un sector de progreso y otro de redacción», los dos con su «importancia», si bien el primero es el que ha hecho avanzar a la sociedad. No obstante, ha continuado, «no se ha de menospreciar a determinadas fuerzas de la reacción, que han intentado conservar sus privilegios, pero también valores», algunos de los cuáles había que respetar y conservar, como se han dado cuenta más tarde quienes, «a veces, iban más deprisa».

SÍNTESIS

La jueza emérita y exalcaldesa ha esgrimido que ahora, para que el progreso siga adelante hay de fijarse más «en las actividades que ayudan a avanzar y no en la etiquetas que tratan de utilizarse para ganar escaños» y también ha apostado por esa «síntesis social» para centrarse en actividades, objetivos, como la Agenda 2030, «que es el conjunto de aspiraciones donde puede estar ahora la sociedad».

En su opinión, es necesario que los partidos políticos «se transforme, dejen de ser núcleos rígidos y se abran, centrándose en objetivos y no tanto en las etiquetas que los promocionan» y que, en ese camino, «permitan que puedan confluir personas que vengan de uno u otro partido, si la iniciativa es interesante».

Para Carmena, la aparición de agrupaciones parlamentarias «es indicativo» de la necesidad de evolucionar, frente a formas tradicionales y «núcleos absolutamente cerrados en sí mismos y que impiden transversalidad alguna».

EL TIEMPO DE LAS MUJERES

La autora de La joven política ha sostenido que, como reza el título del ciclo, «es el tiempo de las mujeres» porque sus valores «se necesitan en este momento y por eso la sociedad nos mira, nos busca y nosotras sabemos que tenemos que asumir esa tarea de subirnos al pódium».

Ha contado que en el libro pone de manifiesto como el movimiento feminista ha dado una enseñanza «extraordinaria» ya que «nunca ha tenido un partido político, nunca ha sido violento y ha sido ganador» puesto que se ha logrado lo que era «impensable» hace 90 o cien años.

De estos valores, ha resaltado que la mujer, durante mucho tiempo, «ha sido cuidadora» y «la política es la ciencia del cuidado, porque no tiene otro sentido que facilitar la vida de los demás», este valor «es cultural», ha reconocido, «pero nos ha conformado de tal manera que tenemos una vinculación a la vida cotidiana, a la vida de la vida», a las necesidades fundamentales del ser humano y al cariño, «las dos cosas que determinan que los seres humanos seamos felices», así como una mayor atención por lo concreto.

Ha añadido que cada vez se busca que el desarrollo estén encabezado por mujeres y bajo su dirección. También ha considerado que los valores de la mujer están en contra de la violencia y se centran más en buscar «alternativas para resolver los conflictos, escucha, buscar maneras de encontrar acuerdos, incorporar lo de otros».

Carmena ha asegurado que el movimiento feminista «nunca fue violento» y si bien las mujeres, en su esfuerzo por el reconocimiento de sus derechos, desarrollo y capacidad de decisión «cuestionamos el patriarcado, la masculinidad tradicional y hemos sufrido en determinados casos y, siguen sufrimiento muchas mujeres de una manera injusta, una violencia inadmisible, asesina, brutal, que no tiene nombre», pero «que nosotras no la hemos empezado, todo lo contrario».

DECIR SÍ A LA VIDA

Manuela Carmena ha animado a los jóvenes a decir «a la vida que sí» y a probar todo, no tener miedo, «que ensayen y busquen». A colación, ha recordado un artículo titulado ¡Muchacha di que sí!, de la periodista y escritora Begoña García Diego, que ella leyó con 15 años y que fue un referente para ella, como una «bandera feminista en aquel momento cuando teníamos tantos temores y dudas».

Asimismo, ha mencionado a su profesora de Matemáticas del colegio, «la señorita Camacho», que un día les pidió, a quienes fueran a ir a universidad, que se comprometieran con seguir trabajando como profesionales porque era «un privilegio» y había que dar a la sociedad «lo que la sociedad te había dado».

Carmena ha alentado a los jóvenes a orientar su vida «por el afán de modificar el mundo» «y lo que no nos gusta de la sociedad», algo «complejo y difícil», pero también «apasionante, una arquitectura, una ciencia de la estructura social, del aventurismo social fascinante».

El ciclo El tiempo de las mujeres ofrece una serie de conversaciones protagonizadas por mujeres de amplia trayectoria de la sociedad española. La primera invitada, Manuela Carmena, ha mantenido una conversación con la periodista Genoveva Crespo, este viernes, en el Aula Magna del Paraninfo de la Universidad de Zaragoza. El acto ha sido moderado por el escritor, periodista y profesor de la Universidad de Zaragoza, Luis Alegre.