Carla Antonelli critica que se haya usado a personas trans como «moneda de cambio»: «Todo ha sido una guerra de poder»
Reprocha la «batalla fratricida, absurda y de guerras de poder» que se ha originado con la Ley Trans
La activista por los derechos de las personas trans y número 5 en la lista de Más Madrid a la Presidencia de la Comunidad, Carla Antonelli, ha criticado que se haya usado a las personas trans como «moneda de cambio» y ha asegurado que las negociaciones y discrepancias en torno a la Ley Trans se han debido a «una guerra de poder».
«A mí lo que me parece lamentable es que se hayan utilizado nuestras vidas como monedas de cambio. Yo tengo 63 años y a mí no me tumba mi identidad ni San Pedro Bendito», ha expresado en una entrevista a Europa Press Antonelli, quien se ha preguntado si es normal que «personas que presumen de feministas estén brindando con champán porque Elsa Ruiz ingrese en un psiquiátrico».
Así, ha asegurado que las personas trans se han convertido «en un saco de boxeo donde descargan la ira y la furia todo el mundo» y ha subrayado que «no existe el derecho al acoso», además de alertar de que los delitos de odio aumentaron un 67% más el año pasado.
Sobre las discrepancias en torno a la ley, ha afirmado que hubo «una cuestión de celos de ver quién enarbolaba la bandera del feminismo» en relación al Ministerio de Igualdad y Carmen Calvo. «Todo esto es mentira. Todo esto ha sido una guerra de poder, nunca jamás fue ideológica, y esto además se está demostrando no solamente en España sino en todo el planeta», ha defendido.
«Yo no me moví jamás de la postura oficial del partido(…) He estado, estaba con el PSOE de toda la vida, con el PSOE de los derechos civiles, de Zapatero (expresidente del Gobierno), de Pedro Zerolo», ha afirmado la exdiputada socialista, a lo que ha añadido que el texto del que partía la ley era «super vanguardista e incluso más avanzado de lo que desgraciadamente ha quedado la actual Ley Trans».
«Quiero dejar claro que no porque el Ministerio de Igualdad o Irene Montero hubiesen querido menos, sino por esta batalla fratricida, absurda y de guerras de poder que ha habido entre medio», ha reprochado la activista.
Asimismo, se ha referido a la norma que se votó en 2019, en la que «nadie protestó, ni siendo Carmen Calvo ministra de Igualdad, ni borraba a las mujeres por ningún lado». «Qué casualidad que justamente esto se convierta en el eje de la falsa polémica», ha resaltado.
LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN «EMPIEZA Y TERMINA»
Por otro lado, ha aludido a la libertad de expresión, ya que según ha explicado «empieza y termina». «No es libertad de expresión fomentar el nazismo», ha subrayado, además de defender que la libertad no puede ser «atacar de forma conjunta a un colectivo» para hacer creer que es «criminal, peligroso, de violadoras y asesinas».
«Y pregunto, ¿es qué no tenemos derecho a equivocarnos? Pregunto porque al final se nos está exigiendo una perfección que no se le exige al resto de la sociedad», ha cuestionado Carla Antonelli.
«Me parece repulsivo que para intentar ganar adeptos y adeptas tengas que hacer una conjunción de realidades que no tienen que ver nada la una con la otra», ha criticado.
Ha relatado como en 2020 se intentó crear un «triunvirato» sobre que si se estaba en contra de los vientres de alquiler y a favor de la abolición de la prostitución tenías que estar en contra de las leyes trans. «Aquella noche es como si tú coges un cuchillo y me abres en canal una herida. Yo empiezo a sangrar», ha expresado.