Cantabria instalará unos 2.000 contenedores marrones en 11 municipios para iniciar el reciclaje orgánico

Mediante una experiencia piloto de un año en la zona del Besaya con el fin de cumplir las directrices de la UE en 2023

El quinto contenedor llegará a Cantabria a través de una experiencia piloto mediante la que se instalarán unos 2.000 container en 11 municipios de la región para poner en marcha el reciclaje de materia orgánica, con la intención de llegar al año 2023 cumpliendo las directrices marcadas por la Unión Europea en este sentido.

Así, el proyecto piloto tiene un año de duración e incluye a los municipios de lo que para la empresa pública MARE -encargada de la gestión de residuos en la región- es la zona de recogida del Besaya: Anievas, Arenas de Iguña, Bárcena de Pie de Concha, Cartes, Castañeda, Los Corrales de Buelna, Molledo, Puente Viesgo, Reocín, San Felices de Buelna y Santillana del Mar.

Este área comprende aproximadamente al 8 por ciento de la población cántabra -más de 41.000 habitantes- y se ha seleccionado para la iniciativa por combinar municipios rurales y urbanos. En ellos se probará el contenedor marrón durante un año y a continuación se hará un estudio de su funcionamiento con el objetivo de ampliar en 2023 el servicio a toda la región, que es «una de las primeras» en hacerlo.

La recogida arrancará el próximo día 23 con el primero de los contenedores marrones en Bárcena de Pie de Concha, seguido del resto de municipios, donde también se completarán los contenedores de vidrio, cartón y textil para aumentar el reciclaje.

Así lo ha anunciado este martes el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, en declaraciones a los medios previas a una reunión en el Centro de Investigación del Medio Ambiente (CIMA) de Torrelavega con los alcaldes de los 11 municipios implicados, en la que también han participado el director general de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, Antonio Lucio, y el director general de MARE, José María Díaz.

El consejero ha remarcado que «se acabaron aquellos momentos de producir, usar y tirar; estamos en el momento de reutilizar, reusar y reciclar», un proceso en el que Cantabria «está inmersa», como muestran las cifras de las que, a su juicio, se debe «sacar pecho».

Y es que «la ciudadanía cántabra está cada vez más concienciada con el reciclaje», ha dicho, destacando los «muy buenos datos» de reciclaje de la comunidad en los últimos años.

Esto es «fruto de la colaboración ciudadana» y su «comportamiento ejemplar» y también gracias a las campañas de concienciación impulsadas desde la Administración, como la que ha iniciado ahora la Consejería para dar a conocer la instalación del quinto contenedor, con el lema Que no te resbale y la imagen de un desecho orgánico -una peladura de plátano-.

Blanco también ha aclarado que «en principio» a los ciudadanos no les va a costar más dinero este nuevo servicio, ya que está contemplado en el presupuesto de su Consejería para 2022. Éste alcanza en su totalidad los 153,7 millones de euros, de los que 89 millones son para la Dirección General de Biodiversidad, Medio Ambiente y Cambio Climático, de la que depende la gestión de MARE para la recogida y tratamiento de residuos y la implantación de la recogida selectiva de materia orgánica.