Cantabria firmará «próximamente» con el País Vasco el convenio sanitario para el Valle de Villaverde

El Gobierno otorga al municipio una subvención de 10.000 euros, que el Ayuntamiento convertirá en cheques de 100 euros para los vecinos

Los gobiernos de Cantabria y el País Vasco podrían firmar «próximamente» el convenio sanitario para que los vecinos de Valle de Villaverde puedan recibir atención sanitaria en el Sistema Vasco de Salud (Osakidetza).

«Estamos esperando ya culminar en los próximos días el famoso convenio que Cantabria ya ha mandado a Euskadi para que lo ratifiquen y que tendría no dentro de muchos días la firma por parte del lehendakari y del presidente cántabro», ha explicado el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, que ha señalado que su voluntad es llegar a un acuerdo «cuanto antes».

Así lo ha avanzado Revilla a preguntas de la prensa tras reunirse este martes con la alcaldesa de Valle de Villaverde, Esther Gómez, para analizar el estado de diferentes proyectos de infraestructuras que tienen el objetivo de luchar contra el despoblamiento y dinamizar la actividad económica del municipio.

Revilla ha detallado que el convenio está en estos momentos «ultimándose» y el País Vasco está llevando a cabo «los trámites administrativos y jurídicos que ya ha hecho Cantabria» y que, una vez realizadas las «modificaciones oportunas», podrá ser firmado entre ambos presidentes «solucionando un problema muy demandado». Por su parte, la alcaldesa ha destacado los «avances» en este convenio.

Al encuentro también ha asistido la consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior, Paula Fernández Viaña, quien ha firmado otro convenio para que el Valle de Villaverde reciba una subvención de 10.000 euros y que, según el compromiso adquirido por el Ayuntamiento, se materializará en la concesión de cheques de 100 euros a los vecinos para la compra de bienes y servicios en establecimientos comerciales y hosteleros del municipio.

La consejera y la alcaldesa han suscrito el documento, que fija los detalles de un convenio de colaboración que persigue «fijar población y atraer empadronamiento» en un municipio que, según Fernández Viaña, tiene un «riesgo severo» de despoblación.

Así, el cheque de 100 euros para compras de bienes y servicios, debidamente justificados con facturas o tickets, realizados en el municipio con posterioridad a la solicitud, podrán recibirlo las personas empadronadas que mantengan el padrón al menos durante un año más, que estén al corriente de obligaciones económicas.

Revilla ha señalado que el objetivo de esta iniciativa es «atraer y fijar población» al tiempo que incentivar la actividad económica en el municipio, al igual que otras iniciativas y proyectos del Gobierno autonómico, como la inversión de 2 millones de euros en la mejora de la carretera del Alto de La Escrita; la próxima finalización del parque de La Capitana o la dotación de banda ancha de internet.

Además, el presidente regional ha destacado que por su condición de enclave cántabro en el País Vasco, el Valle de Villaverde recibe en 2021 casi 125.000 euros del Fondo de Cooperación Municipal.

Igualmente, en la delimitación de municipios con riesgo de despoblamiento, que ha realizado el Consejo Asesor de Cantabria, el municipio es considerado con «tratamiento especial y diferenciado», ya que tiene una población de 286 personas, una densidad del 14,6 por ciento y un alto índice de envejecimiento (32,2 por ciento), presentando una «particular idiosincrasia» al ser un enclave.

El Ayuntamiento también está incluido en las acciones de la Consejería de Presidencia para la extensión de la administración electrónica y la red segura de banda ancha y soporte en la sede municipal y ha contado con otras mejoras de las dependencias públicas, como la calefacción del centro cívico.

Finalmente, la alcaldesa ha destacado los «pasos adelante» que se están dando para que los vecinos cuenten con servicios públicos «de calidad» y ha apuntado que el convenio suscrito hoy supone una «inyección de efectivo» en un momento «muy necesario» para los negocios de la zona.

Se trata del primer encuentro de Revilla tras haber estado en confinamiento domiciliario por contacto estrecho con un positivo Covid, y con el que el presidente cántabro retoma su agenda con «mucha ilusión» y «mucha fuerza».