Cantabria aplaude que Bruselas estudie relajar la protección del lobo, aunque «quizá llega un poco tarde»
El Gobierno regional remitirá a la Comisión Europea informes sobre el «crecimiento exagerado» de la población del lobo y los daños que causan
El Gobierno de Cantabria (PP) ve una «buena noticia» que la Comisión Europea se abra a la posibilidad de relajar las reglas de protección del lobo en la UE ante el aumento de ataques al ganado.
«Lo recibimos con agrado. Quizá llega un poco tarde pero bienvenido sea a que puedan empezar a ponerse en marcha unas medidas para controlar el crecimiento exagerado del lobo», ha afirmado este lunes el consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación, Pablo Palencia.
De esta manera ha reaccionado después de que la Comisión Europea haya informado de que está recabando información actualizada sobre la recuperación de la especie en los países de la UE y su incidencia para evaluar si supone un «peligro real» para el ganado y la población local y decidir así si es necesario revisar las normas comunitarias que regulan la protección de este animal.
CANTABRIA REMITIRÁ A LA COMISIÓN EUROPEA INFORMES SOBRE EL LOBO
Después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, haya invitado a las comunidades locales, científicos y a todas las partes interesadas a que presenten, a más tardar el 22 de septiembre, datos actualizados sobre la población del lobo y sus efectos, Palencia ha avanzado que el Gobierno de Cantabria así lo hará.
Según ha explicado el consejero, ya ha dardo orden para que se remitan informes con los datos de los que dispone la Consejería sobre el crecimiento de la población de lobo –se estima que hay una veintena de familias de lobo–; el aumento de la superficie del territorio por donde se extiende –llegando a núcleos de población y zonas costeras– y los «severos» daños que está causando en el ganado.
«Haremos todas las medidas que sean necesarias para intentar combatir ese problema», ha afirmado Palencia, quien ha señalado que la comunidad autónoma va a «continuar intentado convencer a quien haya que convencer de que hay que sacar al lobo del LESPRE».
También ha defendido y mostrado partidario de, mientras tanto, realizar «extracciones puntuales» de determinados ejemplares de lobo en ciertas situaciones, algo que, según ha señalado, se permite el LESPRE.
«No conozco a ningún ganadero que esté en contra de la biodiversidad, del equilibrio natural y de la coexistencia pero de una manera seria, organizada, basado en datos científicos y no polarizada», ha señalado.
LA COMISIÓN EUROPEA RECABA INFORMACIÓN ACTUALIZADA
La propia jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, ha señalado en un comunicado que «la concentración de lobos en algunas regiones europeas se ha convertido en un peligro real» para el ganado y un riesgo «potencial» para los humanos, si bien ha concedido que la UE prevé ya «medidas» para gestionar la situación y ha instado a las autoridades locales y nacionales a ponerlas en práctica.
Sobre la base de los datos recopilados que prevé recabar, la Comisión decidirá sobre una posible propuesta para modificar el estatuto de protección del lobo en la Unión Europea y actualizar el marco jurídico, para introducir, «cuando sea necesario, mayor flexibilidad, a la luz de la evolución de esta especie».
Los servicios comunitarios han detallado que se trataría de una revisión para completar las medidas actuales, que incluyen acciones «que han demostrado ser efectivas en la prevención o reducción significativa» del riesgo «cuando se aplican correctamente» y se ajustan a las circunstancias concretas de cada caso. El marco actual también prevé fondos comunitarios para esta gestión.
El asunto es controvertido en distintos Estados miembro, incluido España, desde donde los gobiernos de Galicia, Cantabria, Castilla y León y Asturias se han dirigido en distintas ocasiones a Bruselas para reclamar que se revise la gestión del lobo como especie en protección especial dado que es una especie en «expansión constante» en estos territorios.
Sin embargo, el Gobierno español se alineó con otros once países de la UE a comienzos de este año para pedir en una carta al Ejecutivo comunitario garantizar la protección del lobo frente a una resolución del Parlamento Europeo en la que se reclamó cambiar el estatus de protección de lobos y osos para proteger al ganado de los ataques de estos animales.