Cani Fernández (CNMC) defiende el derecho de competencia para identificar los posibles monopolios digitales
La presidenta de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Cani Fernández, ha defendido la necesidad de proteger el derecho de competencia ya que permite «identificar» los posibles abusos de posición en los mercados digitales, los cuales se «abocan» a situaciones de monopolio.
Durante su intervención en la Cátedra Fundación la Caixa Economía y Sociedad, la responsable de la autoridad de competencia española ha apostado por una convivencia entre la regulación y la actuación en estos mercados para «frenar» que herramientas digitales como Google «se decanten» por un modelo de menor liberalización.
En este sentido, Cani Fernández ha puesto en valor los últimos pasos dados por la Comisión Europea, que ha aprobado la Ley de Mercados Digitales con el fin de regular el comportamiento de estos «guardianes de acceso».
«El modelo actual ilustra bien como el derecho de competencia y las obligaciones impuestas por la ley de Bruselas son herramientas necesarias para que un mercado sea competitivo. No hay que renunciar a este derecho», ha señalado.
Preguntada por la futura regulación, si bien ha lamentado que se ha llegado «más tarde de lo debido», ha afirmado que al menos «se ha llegado», por lo que ahora es el momento de ser «efectivos». «Tengo esperanza. Nos la jugamos si no lo hacemos bien», ha apuntado.
FONDOS EUROPEOS Y NUEVAS FUNCIONES
La llegada de los fondos europeos es una prioridad «absoluta» para la CNMC. Así lo ha transmitido la presidenta del ente, aunque ha recordado que entre sus funciones no se encuentra la supervisión de estas ayudas, sino que su único objetivo es garantizar que el mercado sea lo más competitivo y eficiente posible.
En la misma línea, Fernández ha expresado que tampoco es una competencia de la CNMC controlar la inflación, pero se muestran «atentos» a que la bajada de los costes se traslade a los precios a los que se enfrentan los consumidores.
A su vez, ha señalado que la CNMC «no es una autoridad de consumo», lo que le ha llevado a lanzar una crítica velada contra las administraciones públicas, lamentando que se está imponiendo una carga de trabajo que «no es propia» de una entidad reguladora.
«Lo urgente nos impide hacer lo importante. Tenemos nuevos encargos como la supervisión del IVA de los alimentos, el traslado del impuesto a la banca… pero no son funciones que tenemos que desarrollar en la CNMC», ha explicado.