Calviño espera que un TC con el «mandato caducado» no cuestione la separación de poderes interfiriendo en el Congreso
La vicepresidenta económica del Gobierno, Nadia Calviño, espera que el Tribunal Constitucional que, ha recordado, tiene miembros con el «mandato caducado», no paralice la tramitación de la reforma que, precisamente busca desbloquear su renovación, y no «ponga en cuestión el debate parlamentario» que, según ha recalcado, «es la base de la separación de poderes y la soberanía popular».
Así se ha pronunciado Calviño en los pasillos del Congreso al ser preguntada sobre la posibilidad de que el TC acepte la petición del PP de paralizar de forma cautelarísima la tramitación parlamentaria de las enmiendas introducidas en la reforma del Código Penal por las que se modifica el sistema de elección y llegada al TC de los dos candidatos nominados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
«Es urgente poner fin a esta crisis del Poder Judicial», ha subrayado Calviño, mostrando su deseo de que el TC no adopte una decisión que pueda afectar al «buen funcionamiento instituciones democráticas». En este contexto, ha aprovechado para volver a pedir al partido de Alberto Núñez Feijóo que «deje de intentar fosilizar, suspender e inhabilitar» el «buen funcionamiento de las instituciones».