Calviño dice que no hay retraso en la derogación de los despidos por bajas acumuladas y que será «urgente»
Insta a seguir abordando el absentismo
La vicepresidenta tercera de Asuntos Económicos y Trasformación Digital, Nadia Calviño, ha afirmado este martes que la derogación del artículo 52 apartado d que permite el despido por encadenamiento de bajas médicas será «urgente» y ha dejado claro que hay que seguir abordando las distintas causas de absentismo.
Así lo ha señalado en la rueda de prensa posterior a la celebración del Consejo de Ministros, donde ha afirmado que el Gobierno ha lanzado un mensaje «clarísimo» de que algunas modificaciones se van a abordar de manera urgente y otras serán encauzadas por el diálogo social.
Calviño ha resaltado que sobre la derogación del artículo 52 apartado d del Estatuto de los Trabajadores hay un consenso social y se va a abordar de manera «urgente».
La vicepresidenta tercera ha hecho hincapié en que «no hay ningún retraso» en la derogación de este artículo y ha resaltado que es un proyecto normativo que está pasando sus trámites administrativos.
«El mensaje es claro con nuestra intención de eliminar esta posibilidad de despido por encadenamiento de bajas médicas y es un proyecto que está siguiendo su trámite y que entrará en el calendario del Consejo de Ministros en el momento adecuado», ha remarcado.
No obstante, Calviño ha resaltado que también habrá que seguir abordando las causas del absentismo, que algunas deben tratarse en el marco del Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) y que otras pueden requerir de una serie de actuaciones por parte del Gobierno. «Se trata de un asunto complejo que se abordará según los cauces y ritmos concretos», ha apostillado.
Sobre el resto de cuestiones, la vicepresidenta tercera ha dejado claro que lo primero que hizo el Ejecutivo de Pedro Sánchez fue establecer las mesas de negociación en las que están representadas las empresas, tanto las grandes como las pequeñas, y los representantes de los trabajadores, que ya dieron su fruto con el acuerdo de subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 950 euros.