Bové Montero y Asociados facturó 7,3 millones en su año fiscal, un 9,5% más
La firma de servicios profesionales Bové Montero y Asociados ha concluido el ejercicio fiscal 2019/2020 con una facturación de 7,3 millones de euros, lo que representa un incremento de un 9,5% en comparación con la cifra alcanzada en el periodo agosto 2018/julio 2019.
Su presidente, José María Bové, ha puesto en valor la «resiliencia» de la actividad tras obtener un volumen de negocio récord en un solo ejercicio en el contexto de una «muy compleja coyuntura económica» cuyo curso, en su opinión, «no se reconducirá hasta que las certidumbres relacionadas con el tratamiento y vacunación contra el coronavirus se consoliden plenamente».
El directivo argumenta que su foco en clientes internacionales de base industrial ha permitido «asentar el crecimiento experimentado en los últimos años» y afrontar un ejercicio «atípico marcado por los efectos de la pandemia». Bové Montero y Asociados ha cerrado el último ejercicio fiscal con una plantilla de cerca de 100 personas.
El plan estratégico de la firma contempla una inversión cercana a los 450.000 euros en el trienio 2019/2021 destinada a la transformación tecnológica. La firma ha señalado estar implantando un sistema de digitalización de los servicios clave con el propósito de impulsar «la eficiencia y la calidad» en beneficio de sus clientes. El foco está puesto asimismo en la modernización de herramientas internas que optimicen la gestión de la firma.
En lo que respecta a las áreas de actividad, Bové señala que sigue ampliando sus servicios, como el área de precios de transferencia, un ámbito sobre el que, según la firma, las empresas requieren de asesoramiento especializado a causa de «los crecientes requisitos tributarios».