Biden y Trump dedican el domingo a defender su programa en redes sociales a dos días de los comicios
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el candidato demócrata, Joe Biden, han dedicado este domingo a reclamar el voto de los estadounidenses a través de la redes sociales, cada uno en defensa de sus respectivos programas y entre ataques a su contrincante.
«Os prometo esto: voy a terminar con el caos de Donald Trump y a terminar con esta crisis», ha escrito Biden, con un énfasis particular sobre la población latina.
«Desde sus actos atroces de separar familias en nuestra frontera hasta su abandono del pueblo de Puerto Rico después del huracán María, el presidente Trump ha atacado la dignidad de las familias latinas una y otra vez. Terminará cuando sea presidente», ha declarado.
Biden ha reprochado también el elevado desempleo nacional por la pandemia de coronavirus. «Casi 23 millones de estadounidenses están en paro. Casi 1 de cada 5 negocios han cerrado sus puertas. Millones de personas se encuentran al borde del desahucio. Simplemente, no nos podemos permitir otros cuatro años de Donald Trump», ha añadido.
«Necesitamos construir puentes, no muros; abrir nuestros brazos, no cerrar nuestros puños; centrarnos en lo que nos une en lugar de separarnos. Necesitamos ser lo que somos en nuestro mejor momento: Una Sola América», ha concluido.
Trump, por su parte, ha publicado un vídeo de un minuto de duración en el que defiende una agenda nacionalista: «América primero» y su política económica de recuperación en plena pandemia. «Estamos remontando mejor que nadie», ha asegurado el presidente.
Ya en un mensaje de texto, Trump ha acusado a Biden de que quiere «cerrar el país, quizás durante años», algo que es «de locos». «No va a haber cierres. El Gran Regreso Americano ha comenzado», ha añadido.
Finalmente, Trump ha asegurado que sus números de cara a las elecciones del 3 de noviembre «lucen muy bien» a pesar de que la práctica totalidad de las encuestas lo sitúan por detrás de Biden. Irreductible, el presidente ha asegurado que su rival demócrata «ya está comenzando a retirarse de ciertos estados» y que «la Izquierda Radical está cayendo», como describe al Partido Demócrata.