Belarra reprocha al PSOE mantener «congelada» la Ley de Vivienda y urge a sacarla con regulación efectiva del alquiler
La líder de Podemos y ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha reprochado que el PSOE mantenga la Ley de Vivienda «bloqueada» en el Congreso y, consciente de que «no es perfecta», urge a su aprobación y que se regule de manera efectiva el precio de los alquileres en zonas de mercado tensionadas.
Así lo ha indicado en un mensaje en Twitter, que se produce despu9és de las declaraciones de la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, quien ha alejado la posibilidad de establecer en la Ley de Vivienda un límite máximo de aumento del 3% de todos los alquileres en las llamadas «zonas tensionadas».
«La Ley de Vivienda no es perfecta, pero lo que con seguridad no arregla nada es que siga bloqueada en el Congreso por el socio mayoritario. Necesitamos una ley que regule de manera efectiva los alquileres en las zonas tensionadas y un amplio parque de vivienda social. Es urgente», ha lanzado en redes sociales.
También otros dirigentes se han pronunciado sobre estas palabras como el diputado de Unidas Podemos en el Congreso y miembro de En Comú Podem, Gerardo Pisarello, para quien «lo excepcional, lo anómalo y lo intolerable es que haya gente dejándose hasta el 50% de sus ingresos en pagar un alquiler». «Nada se resolverá si no se pone freno a los alquileres abusivos, ministra», ha lanzado también en redes sociales.
La semana pasada Belarra ya expresó que esta ley es una «urgencia social» e «imprescindible», pero quiere ser prudente porque muchas veces se ha dicho que están cerca de cerrarla y no quiere generar «falsas expectativas», dado que la gente está preocupada para que se apruebe lo antes posible.
Eso sí, recalcó que con los alquileres «por las nubes» y con la subida de las estadísticas de lanzamiento, ha demandado que las mejoras que se hablan en las reuniones deben estar contempladas con precisión en el texto normativo, algo que aún «no se ha producido».
Fuentes del socio minoritario expresaron recientemente que confiaban en poder desatascar la normativa antes de que terminara este mes, y admitían que en las últimas fechas se habían conseguido progresos que debían pasar por la supervisión técnica del Ministerio de Economía. Sin embargo, con el paso de los días ese optimismo se ha ido rebajando.
Los acercamientos se habían producido en materia de desahucios, la opción de reducir la vacatio legis (el periodo de tránsito hasta la aplicación efectiva de la norma) fijada inicialmente en 18 meses (aspecto que demanda también Bildu y ERC) y las perspectivas de bajar el número de viviendas para determinar la figura de gran propietario, ahora establecida sobre 10 pisos.
No obstante, los dos socio se centraban sobre todo en desplegar una regulación de precios de alquiler en zona de mercado tensionado que asegure su funcionamiento efectivo, para aquellas autonomías que decidan acogerse a este mecanismos.
Y una parte esencial del debate se ceñía al encaje que deben tener las viviendas que entren por primera vez en el mercado del alquiler, donde Podemos aspira que se regulen directamente por el índice de precios que elaborará el Ministerio de Transportes al entender que preserva rentas más bajas para los inquilinos y es una parte muy minoritaria de los pisos en arrendamiento.
Recientemente, Pisarello también señalaba que había que aumentar la reserva de suelo público para elevar el número de vivienda en alquiler social, sanciones a las malas prácticas e incentivos fiscales a aquellas empresas que quieran aumentar ese parque de vivienda asequible.