Bauzá (Cs) tacha de «aberrante» las posición de la UE sobre Afganistán y pide definir una estrategia exterior común

Avisa de la «debilidad» de la política exterior europea y española y ve a Borrell como «el ministro de Exteriores de Sánchez en la UE»

El eurodiputado de Ciudadanos José Ramón Bauzá ha calificado de «aberrante» la posición de la Unión Europea ante la situación en Afganistán, incluidas las declaraciones del Alto Representante de Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, y ha subrayado la necesidad de que los Veintisiete definan una estrategia exterior común que permita anticiparse a distintos escenarios en el ámbito internacional.

«La UE tiene que tener una estrategia exterior común definida y para eso lo que necesitamos es un liderazgo. Hay que ser propositivo y proactivo y definir las situaciones antes de que se produzcan», ha dicho Bauzá en una entrevista en esRadio, recogida por Europa Press.

Por ello, ha calificado de «banal, vaga, absolutamente impresentable y aberrante» y «abrumadoramente vergonzosa» la posición pública de la UE en relación con lo que ocurre en Afganistán, donde los talibán han aprovechado la retirada de las fuerzas internacionales para hacerse con el poder veinte años después de que su régimen fuera derrocado por la invasión estadounidense.

«No puede ser que desde la UE haya simplemente un comunicado diciendo que le preocupa la situación actual y que hay que llegar a un gobierno inclusivo», ha comentado, añadiendo que lo que está sucediendo ahora se podía haber previsto desde que el Gobierno de Donald Trump anunció en 2020 que las tropas estadounidenses se iban a retirar.

En este contexto, ha indicado que la «fragilidad» de la UE en el ámbito internacional «es cada vez mayor» y afronta amenazas cada vez más graves, por lo que no puede estar «al albur de un Alto Representante o de una Comisión que actúan siempre a rebufo de los acontecimientos».

Especialmente preocupado se ha mostrado porque potencias como China, Rusia e India estén «aprovechando las flaquezas» de los europeos para ocupar su lugar en países como Afganistán o Siria.

«NO SE PUEDE NEGOCIAR» CON UN GOBIERNO TALIBÁN

Además, el representante de Cs ha criticado que Borrell, con el argumento de que los talibán han ganado la guerra, abogue por dialogar con ellos para evitar que su llegada al poder genere una crisis humanitaria y un movimiento migratorio masivo hacia Europa.

«No se puede negociar con un gobierno talibán terrorista que lo que hace es impedir las libertades fundamentales más básicas, en este caso de las mujeres», ha advertido Bauzá, que se ha preguntado si Borrell también vería bien el diálogo en el caso de que hubiera elecciones en Alemania y ganase «un partido nazi» dispuesto a «actuar contra las libertades y derechos fundamentales del pueblo judío».

A su juicio, se debería convocar ya un Consejo Europeo extraordinario para impulsar una acción europea conjunta y el Alto Representante debería dejar claro que lo que ha ocurrido en el caso afgano «no va a volver a pasar». Sin embargo, cree que esto no se ha producido porque la política exterior de las instituciones europeas es «absolutamente débil».

Esa misma debilidad la observa en el Gobierno de España, pues la exministra Arancha González Laya dejó, en su opinión, «la diplomacia española al nivel de la alfombra» con «la cooperación inestimable y partícipe de Borrell, que se ha comportado más como ministro de Asuntos Exteriores en la UE de Pedro Sánchez que como el Alto Representante».

Asimismo, le ha acusado de actuar como «el aliado natural de los dictadores de Latinoamérica» porque «hace la vista gorda» ante ciertas situaciones, y ha mencionado en particular el caso de Daniel Ortega en Nicaragua.

LA «DESFACHATEZ» DE SÁNCHEZ, QUE «PREFIERE ACABAR SUS VACACIONES»

En cuanto a Sánchez, Bauzá ha lamentado que, ante una crisis internacional de la magnitud de la de Afganistán, continúe en Lanzarote, su destino de vacaciones, y tenga la «desfachatez» de dejarse fotografiar, durante una videoconferencia con varios de sus ministros, vestido con traje y «con unas babuchas».

«Esa es la imagen internacional de un presidente que prefiere acabar sus vacaciones» antes de regresar al Palacio de la Moncloa mientras piensa «a ver si tengo una reserva para ir a Hollywood y que me vean lo guapo que estoy», ha manifestado.