Batet llama a practicar la «política útil» basada en acuerdos y rechazar la que sólo busca el conflicto

La presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, ha apostado por impulsar «la política útil, la que busca coaligar esfuerzos» y se basa en el diálogo y el acuerdo, frente a la que busca el conflicto, la polarización y el enfrentamiento, que «debemos rechazar» porque «de ello nunca ha surgido nunca ningún avance».

Batet se ha pronunciado así en una conferencia que ha impartido este viernes en el Parlamento de Cantabria, en el marco de las conmemoraciones del 40 aniversario del Estatuto de Autonomía de la comunidad, por lo que también ha puesto en valor su contribución «de forma activa» en estas cuatro décadas al progreso de España.

En el acto, la Cámara ha rendido homenaje a los 10 diputados que redactaron el borrador del Estatuto de Autonomía y ha entregado una insignia conmemorativa a tres de ellos: Mariano Linares, Alberto Cuartas y Jesús Cabezón (los dos primeros por UCD y el tercero por el PSOE). Éstos redactaron aquel primer documento junto a los hoy ausentes Ciriaco Díaz Porras y Esteban Solana y otros cinco ya fallecidos: Leandro Valle, Ambrosio Calzada, Alberto Mateo del Peral, Jaime Blanco y Mario García Oliva.

Tras hacerles entrega de una insignia creada para este 40 aniversario, Batet ha destacado que Cantabria «es un magnífico ejemplo del modo de sintetizar los sentimientos de los ciudadanos de su territorio», porque «como comunidad histórica, tal y como se reconoce estatutariamente, ha sabido desplegar una identidadpropia en el conjunto de España que ha dotado a los cántabros de un sentido de autoconciencia y que se sientan reconocidos por los demás y respetados en la diferencia».

Al mismo tiempo, «ha contribuido activamente a la construcción del proyecto compartido de España practicando la cultura política de la reciprocidad y la lealtad».

Al hilo, la presidenta del Congreso ha destacado que los parlamentos autonómicos, además de ser una «pieza medular» de un Estado políticamente descentralizado, juegan «un papel fundamental para dar estabilidad y prosperidad a la sociedad», ya que «son el centro de la deliberación y decisión de los asuntos públicos, el lugar en el que se expresa el pluralismo social».

«Cumple la función de encauzar los conflictos, representar los distintos intereses existentes en la sociedad y acordar solucionesaceptables por todos», ha dicho, destacando que a lo largo de estos 40 años los parlamentos autonómicos han aprobado un total de casi 7.360 leyes, una media de 613 por legislatura, en las que, además, lo importante es el grado de acuerdo con el que han salido adelante: con un 84% de los votos emitidos de promedio, según un estudio que ha citado Batet, elaborado recientemente por distintas universidades españolas acerca de la práctica parlamentaria en las comunidades desde 1980 hasta 2021.

«En mi opinión esto es política». «Escuchar, debatir, ceder, pactar, son acciones consustanciales al gobierno democrático. De algún modo son el oxígeno de nuestra forma de gobierno y gracias a ellas nuestras democracias se mantienen firmes y vigorosas», ha resumido Batet, al tiempo que ha opinado que «la crispación y la polarización permanente» no contribuyen a la convivencia de la sociedad y provocan en los ciudadanos «desafección hacia la política» en lugar de la «implicación» que se necesita de ellos.

En el acto han estado presentes diversas autoridades de Cantabria, como el presidente, Miguel Ángel Revilla; la delegada del Gobierno, Ainoa Quiñones; o el presidente del Parlamento, Joaquín Gómez; así como diputados regionales, consejeros del Ejecutivo, representantes del ámbito judicial, etcétera.

El presidente del Parlamento ha subrayado que la consecución de la autonomía para Cantabria fue «un proceso histórico que recuperó nuestra identidad pese a que en los primeros momentos no se apostaba por ella».

Como ha dicho, el sentimiento autonomista «se despertó con la llegada de la democracia y el debate autonómico, excitado por un contexto de inestabilidad económica, conflictos laborales y reivindicaciones de infraestructuras», demandas que, en su opinión, fueron uniendo a la sociedad en torno a la convicción de una Cantabria uniprovincial.

«La sociedad cántabra, decidida y audaz, quebró la voluntad inicial del gobierno central, decidido a anexionarnos a Castilla», ha ensalzado.

Así, Gómez ha resaltado que el texto del Estatuto de Autonomía que consensuaron los ponentes implicados se aprobó en el Congreso por una amplia mayoría de 235 votos afirmativos, 2 en contra y 23 abstenciones.

De los diputados ya citados que redactaron el borrador, Alberto Cuartas y Jaime Blanco, junto a Justo de las Cuevas, como diputados por Cantabria en el Congreso, también formaron parte de la segunda ponencia, la que se desarrolló en las Cortes Generales para impulsar el Estatuto, además de «destacados nombres propios de la Transición como Gregorio Peces-Barba, Jordi Solé, Miguel Roca o Manuel Fraga».

A continuación, pasó al trámite del Senado y en la comisión correspondiente coincidieron en informar sobre el mismo otros tres senadores cántabros: Ambrosio Calzada, Mario García-Oliva y Leandro Valle.