Bal insta a Arrimadas a dar «paso al lado» y la acusa de poner «personas por delante» para «seguir mandando detrás»
Defiende que su candidatura es «la esperanza» para «salir del bache» y denuncia «presiones» a militantes desde «el aparato oficial»
VALÈNCIA, 7
El portavoz adjunto de Ciudadanos en el Congreso de los Diputados y candidato a liderar el partido como portavoz político, Edmundo Bal, ha instado a la actual presidenta de la formación, Inés Arrimadas, a dar «un paso al lado» tras acusarla de «poner a personas por delante» con su candidatura «oficialista» para realmente «seguir mandando desde detrás», al tiempo que ha cuestionado cómo se puede refundar Cs «con las mismas caras que presidían lo viejo».
«Por ahí no voy a pasar», ha recalcado Bal este sábado en declaraciones a los medios antes de mantener, junto con el concejal madrileño y candidato a secretario general de la formación, Santiago Saura, un encuentro con afiliados en la sede de Cs en València. «Lo que ha hecho –Arrimadas– con la candidatura oficialista es poner a unas personas por delante para ella seguir mandando en el partido desde detrás», ha reprochado.
Bal, que ha señalado que los cargos de Cs «no pueden ni deben negar la mala situación en la que se encuentra el partido», ha reivindicado «volver a las bases» de la formación para «ensanchar su espacio ideológico» y que en el proyecto «quepa tanto el centroderecha como el centroizquierda, y los que nos definimos como del centro puro, que es lo que somos muchos de los que militamos en Cs».
Así, ha defendido el «paso valiente y decidido» de su candidatura por el hecho de «oponerse a la de Inés Arrimadas (…), que nos llevaría necesariamente precipitarnos por el barranco de la extinción», y ha apostado por una refundación «de verdad» y no «meramente cosmética».
«Esta candidatura ya ha conseguido algo muy relevante, que es despertar la ilusión de los afiliados y los militantes como primer paso para poder contagiar esa ilusión. También a los votantes en estos importantes procesos electorales que vamos a tener durante 2023», ha expresado.
DENUNCIA «PRESIONES» DEL «APARATO OFICIAL»
En este punto, ha denunciado las «presiones» que «muchos» de los afiliados y militantes «están recibiendo desde el aparato oficial del partido, diciéndoles que nosotros somos una candidatura que se opone al partido».
Frente a ello, ha afirmado: «Lo dije personalmente con absoluta claridad el primer día que di este paso adelante: no somos una candidatura de enfrentamiento, no nos oponemos a nadie». De hecho, ha señalado que pretenden «integrar a todas las personas valiosas» de «la otra candidatura».
«A partir del día 16 de enero vamos a caminar todos juntos para garantizar el futuro de esta opción liberal, nos vamos a sentar para tirar de este carro, para hacer de Ciudadanos ese partido liberal otra vez atractivo a la ciudadanía, otra vez que responda a esos principios que constituyeron en 2006 el nacimiento de Cs», ha apostillado, al tiempo que ha reclamado «verdad, cortesía, elegancia, educación y no entrar en lo personal». «Nosotros hemos respetado a rajatabla esta regla», ha admitido.
Al respecto, ha recalcado que su candidatura «habla claro» y pone «las cartas boca arriba». «Yo seré candidato en las primarias a la Presidencia del Gobierno de España», ha remarcado, al tiempo que ha lamentado que este hecho parece ser que «todavía no les ha quedado claro a algunos compañeros de la otra candidatura».
«SOLEDAD» DE LOS CARGOS INSTITUCIONALES
Preguntado por las críticas de la coordinadora autonómica de Ciudadanos en la Comunitat Valenciana, María Muñoz, o la síndica de Cs en Les Corts, Ruth Merino, al proceso de refundación de la formación, Bal ha lamentado el «sentimiento de soledad» que sienten los cargos institucionales del partido, situación que ha achacado a que la dirección nacional «no va» a esos lugares.
Frente a ello, ha defendido que su candidatura trata de «no solamente tener el teléfono abierto para cuando te llaman, sino de llamar tu» porque «nos hace falta escuchar lo que quiere el afiliado y el cargo institucional».
En el caso de Merino, ha afirmado que «ayer mismo» habló por teléfono con ella y ha indicado que esta «no es la primera llamada», sino que «durante toda esta legislatura y con los distintos problemas que ha habido en las Cortes Valencianas se ha hablado con ella en numerosísimas ocasiones e incluso no solamente para solucionarle problemas, también para felicitarle por sus brillantes intervenciones».
En este sentido, ha considerado que la actual síndica de Cs en Les Corts es una persona que está «en perfecta sintonía» con su candidatura. «Cuando ella ha tenido problemas, con quien ha hablado ha sido con María Muñoz y conmigo, siempre le hemos prestado apoyo y hemos tenido el teléfono disponible», ha subrayado.
«SOMBRAS» DEL PROCESO DE REFUNDACIÓN
Por otro lado, ha admitido que entiende «perfectamente» a las personas «críticas» con el proceso de refundación de Cs, así como las numerosas «sombras» de proceso. «Nosotros prometemos que vamos a alumbrar y quitar esas sombras», ha indicado.
«Hacemos 2.300 encuestas entre afiliados, simpatizantes y cargos institucionales en donde resulta el sentir mayoritario de nuestro partido en relación con las líneas rojas que debemos tener a la hora de pactar, y nos dicen nuestros afiliados que estas líneas son los valores de nuestra Constitución. Por lo tanto, hay que ensanchar el espectro ideológico porque nos lo están pidiendo nuestros afiliados», ha apostillado.
Bal ha mencionado que este estudio ha revelado que «solo el 5% de los afiliados están a favor de un sistema organizativo que se base en una bicefalia». Sin embargo, ha criticado que la actual dirección de la formación «es el sistema que pretende seguir» porque a Inés Arrimadas «le conviene quedarse en el Congreso de los Diputados como portavoz del grupo parlamentario sin necesidad de someterse, por ejemplo, al debate que vamos a tener Patricia Guasp y yo dentro de un par de días y sin confrontar ideas públicamente».
En este punto, ha cargado contra la dirección nacional, a la que ha acusado de pretender que estas consultas «no sean vinculantes». «¿Cómo que no van a ser vinculantes?», se ha preguntado, a la vez que ha garantizado que para su candidatura esas opiniones van a ser «absolutamente imperativas».
De hecho, ha avanzado que «al día siguiente» de llegar a la dirección del partido publicará toda esta información con el propósito de que «se entere todo el mundo de lo que opina mayoritariamente la mayor cantidad de afiliados» de Cs.
«EL COLMO DE LOS COLMOS»
Edmundo Bal ha vuelto a cargar de nuevo contra la dirección nacional y Arrimadas: «El colmo de los colmos es cuando al final de todo este proceso parece que el resultado de la refundación va a ser que los líderes van a seguir siendo los mismos». Y, al respecto, se ha preguntado «cómo se va a refundar algo convirtiendo en nuevo lo viejo con las mismas caras que presidían lo viejo». «En ese momento, yo, dentro de los órganos estatutarios del partido, levanto la mano y digo que por ahí no voy a pasar», ha afirmado.
Por ello, ha pedido a la actual líder de la formación que dé «un paso al lado». «Lo que ha hecho –Arrimadas– con la candidatura oficialista es poner a unas personas por delante para ella seguir mandando en el partido desde detrás», ha censurado.
Así, ha lamentado que, con ello, «al final, los ciudadanos, cuando enciendan la televisión, seguirán viendo la cara de Inés Arrimadas». «Si encienden la tele y ven la cara de Arrimadas, seguirán sin votar a Ciudadanos, pero si ven caras nuevas dirán esto sí que parece de verdad», ha considerado.
Por todo ello, ha reivindicado «un partido nuevo» con un espectro ideológico «mucho más amplio y ancho» en el que se pueda sentir la gente «más a gusto, incluso aquellas personas que votaban al PSOE pero que ahora se encuentran defraudados por la política de Pedro Sánchez, algo que no me extraña».