Bajan las tasas de todas las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria, según un estudio

Las tasas de todas las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria han descendido después de la pandemia de forma generalizada en todas las UCI españolas, según el Estudio Nacional de Vigilancia de Infección Nosocomial –las infecciones asociadas a la asistencia sanitaria–, el Registro ENVIN, de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC).

Estos datos analizaron los casos de 27.558 pacientes de 223 Unidades de Cuidados Intensivos de toda España en 2023. La mejora de las tasas se da en todas las infecciones monitorizadas y es independiente del tamaño o tipo del hospital.

«Estos excelentes resultados, tanto de participación de las UCI españolas como de las tasas de estas infecciones en el año 2023, demuestran la fortaleza de la red de vigilancia epidemiológica creada en torno al Registro ENVIN, así como la recuperación de prácticas asistenciales seguras tras la pandemia, basadas en recomendaciones para prevenir infecciones relacionadas con dispositivos invasores dentro del marco de los proyectos de Seguridad en Pacientes Críticos ( Proyectos Zero ), patrocinados por el Ministerio de Sanidad», explica el responsable del registro, Francisco Álvarez Lerma.

Indicadores como el porcentaje de mortalidad por infección relacionada con dispositivos invasores están ya por debajo de las cifras de 2019 (un 9,63% por el 9,69% prepandemia y casi 5 puntos menos que en 2020). La propia tasa de infección baja respecto a años anteriores, aunque, en este punto, sin llegar a las cifras récord anteriores a 2020.

También desciende el número de pacientes con neumonía asociada a ventilación mecánica e incluso la ratio de uso de esta herramienta, independientemente de la patología base.

«Aunque no se hayan recuperado las cifras que teníamos antes de la pandemia y quede camino por recorrer, parece que vamos de nuevo en la dirección correcta», indica el doctor Xavier Nuvials, intensivista del Hospital Universitario Vall d Hebron (Barcelona) y uno de los responsables del Registro ENVIN-HELICS de la SEMICYUC.

«No nos hemos marcado un horizonte temporal concreto, pero el objetivo es alcanzar las tasas definidas en los estándares de calidad lo antes posible, de ahí que desde el Consejo Asesor de los Proyectos de Seguridad del Ministerio de Sanidad hayamos insistido en la necesidad de retomar los Proyectos Zero en cada uno de los niveles de responsabilidad: local, regional y nacional», prosigue.

SITUACIÓN DURANTE LA PANDEMIA

Durante la primera ola de pandemia, más de un tercio de los pacientes críticos sufrieron infecciones nosocomiales, siete veces más que en 2019. «Se truncaba así una progresión histórica que permitió rebajar a niveles nunca vistos la incidencia de las infecciones relacionadas con la asistencia sanitaria en España», lamentan desde la sociedad médica.

Este empeoramiento se vio acompañado de una mayor incidencia de mortalidad (el 37% de los pacientes con infección nosocomial falleció, por el 27,4% de quienes no tuvieron una infección), así como del hecho de que un 88% de esas infecciones experimentaron una respuesta sistémica grave, sobre todo sepsis.

A pesar de la pandemia y de la tensión de las UCI durante meses, España fue el único país de su entorno capaz de seguir recogiendo y analizando datos de registro de infección nosocomial (en 2020 exclusivamente de pacientes Covid).

Además, se adaptaron en tiempo récord los protocolos para minimizar el impacto de las medidas de prevención del covid-19. «Actualmente, los protocolos de los proyectos vigentes son el resultado de la actualización de los proyectos Bacteriemia Zero y Neumonía Zero realizados a finales de 2021 y los originales de Resistencia Zero e ITU Zero «, explica el doctor Nuvials.

OBJETIVOS A CORTO PLAZO

Promover la aplicación de los paquetes de medidas de prevención de las infecciones y seguir realizando la vigilancia es «fundamental» para la sociedad médica. «Cada centro debe ser consciente de las barreras y dificultades que pueda tener para su implementación, y realizar las acciones de mejora pertinentes. Pero ese análisis también hay que realizarlo a todos los niveles de responsabilidad, mejorando la comunicación entre ellos», afirma el doctor Nuvials.

«Es necesario que desde las consejerías, gerencias y direcciones de los centros y servicios se reconozca la labor realizada en prevención y la necesaria adjudicación de recursos para poder hacerla sostenible en el tiempo», ha asegurado.

Además, los intensivistas también abogan por apostar por la formación. «La actividad postpandemia está siendo muy positiva y se han formado un número importante de sanitarios, probablemente por la incorporación de nuevos profesionales durante la pandemia y el recambio generacional», prosigue el doctor Nuvials. Esta formación es muy transversal, en tanto que la realizan todos los sanitarios implicados en los cuidados del paciente crítico, no solo medicina y enfermería.

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