ASPE propondrá al Gobierno procesos de re-especialización en lugar del MIR para los médicos que cambien de título
La Alianza de la Sanidad Privada Española (ASPE) ha presentado un decálogo, dirigido al Gobierno que surja de las urnas en las próximas elecciones, en el que reclama una mejor planificación de los recursos humanos del Sistema Nacional de Salud (SNS), apostando por avanzar en procesos de re-especialización médica de modo que los médicos no tengan que presentarse de nuevo a un examen MIR para cambiar de título.
A través de un decálogo, que ha publicado este miércoles en Madrid, la patronal considera que «urge abordar» una serie de cuestiones de especial relevancia para reforzar el Sistema Nacional de Salud (SNS), siendo la sanidad privada «aliada clave» en este propósito.
Ante la «escasez de profesionales sanitarios» y para asegurar la disponibilidad de profesionales en las especialidad más demandadas, ASPE propone que los profesionales accedan a ellas completando la formación restante en un periodo más corto de tiempo y con una evaluación de competencias.
«La experiencia acumulada, así como la formación continuada, son garantía de que los profesionales que se forman en España son de la más alta capacitación y es una oportunidad para el sistema aprovechar esas fortalezas con el objetivo de facilitar que los profesionales sean especialistas en varias áreas», ha explicado el presidente de ASPE, Carlos Rus.
Asimismo, Rus ha manifestado España cuenta con «el mejor modelo público-privado», sin embargo «se necesita flexibilidad» para mejorar su funcionamiento. Para Rus, en la actualidad se han generado «departamentos estancos y ahora se necesitan profesionales polivalentes».
Además, desde ASPE apuntan a «que la sequía de profesionales es una medida estratégica». Según la últimas estimaciones de la patronal el 95 por ciento de los hospitales tiene necesidad media-alta de contratación de personal de enfermería, y el 58 por ciento de personal médico.
Por ello, calculan que de cara al futuro, en el año 2027, serán necesarios 9.000 médicos anuales en el SNS, ante lo que piden al nuevo Gobierno «planificar mejor las necesidades de recursos humanos a medio y largo plazo, contando con los ámbitos público y privado».
Otro puntos que reclaman en la panificación de recursos humanos es consolidar el rol del personal de enfermería, reforzando y ampliado su formación, así como la reducción progresiva de las incompatibilidades de ejercicio de los profesionales en la sanidad publica y la privada.
COLABORACIÓN PÚBLICO PRIVADA
Una de las mayores demandas de la patronal es una mejor colaboración público-privada, «dado que la sanidad privada juega un papel vital en la sostenibilidad del sistema», ha indicado Rus.
Para ello, ASPE apuesta por basar exclusivamente en objetivos de eficacia, eficiencia, y mejor aprovechamiento de los recursos todas las decisiones sobre la asistencia y prestación sanitaria, así como los resultado en salud conforme a indicadores claros y comparables.
En este sentido, la patronal considera que con la sanidad privada se puede planificar mejor la respuesta a la demanda asistencial, teniendo en cuenta todos los recursos asistenciales disponibles para una mejor utilización de los mismos, de forma que pueden ser útiles ante posibles contingencias como el desahogo de las listas de espera.
«La sanidad privada también puede ser clave para extender la red de centros de la Organización Nacional de Trasplantes o de los Hospitales Universitarios», ha indicado Rus.
GARANTÍAS EN EL ASEGURAMIENTO
Otro de los puntos del decálogo señala que se establezca un marco de garantías y transparencia entre aseguradoras y prestadores de la asistencia sanitaria, además de regular por escrito las condiciones que vinculan a las entidades aseguradoras y los centros sanitarios.
La patronal ha indicado que la sanidad privada está configurada para ofrecer una mayor accesibilidad y un trato personalizado a los pacientes y para colaborar con el sistema público cuando sea necesario, «no para sustituir la atención ordinaria de la sanidad pública».
Por último, ASPE pide potenciar el acceso de los pacientes a la última tecnología, así como a los tratamientos, algo que cree que es «una obligación para el sistema de salud».
Para ello, pide favorecer la competitividad del sector sanitario en España frente a los países del entorno para «aprovechar la oportunidad que brinda la nueva normativa europea que permite adaptar la imposición fiscal de dispositivos y artículos sanitarios».
En este punto, la patronal indica que la Directiva (UE) 2022/542 del Consejo del 5 de abril de 2022, que entrará en vigor el 1 de enero de 2025, permite adaptar la situación fiscal de aparatos, artículos, dispositivos y equipos sanitarios para ostentar un IVA reducido y superreducido.
ASPE cree que «se trata de una oportunidad para ampliar las capacidades sanitarias y mejorar la atención que se presta al paciente».