Asens (UP) proclama que es el momento de intentar un acuerdo con el PSOE y pide dejar la confrontación sobre el sí es sí
Subraya que el feminismo lanzó un mensaje unánime para dejar los «reproches» y dialogar para intentar conseguir un pacto entre socios
El presidente del grupo Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha defendido que es el «momento del acuerdo» y no de la «confrontación» respecto a la reforma de la Ley solo sí es sí , tras el fuerte choque con el PSOE.
«No solo se puede sino que se debe», ha proclamado a los medios en los pasillos del Congreso y preguntado sobre si se puede recomponer las relaciones con los socialistas, tras el duro cruce de críticas por la toma en consideración de la iniciativa del PSOE para cambiar la normativa, que fue apoyada por el PP y que su grupo votó en contra.
Para el dirigente de En Comú Podem , las manifestaciones del 8M de ayer dejaron un grito «unánime» y dieron una «lección» a las dos alas del Ejecutivo, al reclamar que se sienten a negociar porque tienen «más cosas en común de las que les separa».
«Ahora es el tiempo del acuerdo en lugar de la confrontación», ha insistido para pedir «esfuerzo a todos» para conseguir en «entendimiento», pues eso es lo que pide el movimiento feminista en las calles.
Por tanto, Asens ha abogado por «avanzar en el entendimiento», «dejar atrás los reproches» y recomponer la «unidad del feminismo», así como la mayoría progresista en el Congreso que se rompió el pasado martes durante el debate sobre la propuesta del PSOE y la falta de acuerdo con el Ministerio de Igualdad. Y es que ha defendido que lo que se rompió «se puede recomponer» esa es precisamente «la voluntad» de todas las partes.
El mensaje del presidente del grupo confederal es similar al vertido previamente por la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam , quien ha pedido al PSOE «responsabilidad» para negociar y reconstruir la alianza con los aliados parlamentarios del Ejecutivo para consensuar una reforma de esta ley, al sostener que hay fórmulas para blindar el consentimiento y cambiar el Código Penal ante la rebaja de penas que han decretado los tribunales.