Asens (Podemos) aclara que no les gustan los disturbios pero tampoco pueden ocultar «anomalías» como la prisión a Hasél
Se posiciona en contra pero incide en que ir a una manifestación tampoco puede ser «riesgo de perder un ojo»
El presidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Congreso, Jaume Asens, ha asegurado que los disturbios e incidentes durante las protestas contra el ingreso en prisión del rapero Pablo Hasél, «les preocupan y no les gustan», pero tampoco pueden ocultar el problema de fondo como son determinadas «anomalías democráticas».
En declaraciones a La Sexta, recogidas por Europa Press, Asens ha señalado que los actos de violencia para Unidas Podemos son «evidentemente» acciones que van «en la dirección contraria» a arreglar el «cúmulo de malestares» generados, sobre todo en la juventud, y la «indignación» que ha generado el caso de Hasél.
«No nos gustan y nos posicionamos en contra», ha insistido el dirigente de En Comú Podem para insistir en su defensa de expresiones «pacíficas» de protesta. Con ello, se mostraba más explícito que su compañero de filas, Rafa Mayoral, que esta mañana en el Congreso ha eludido expresar una condena por estos altercados en varias ciudades y cuestionó la actuación de los dispositivos policiales.
Además, diversos partidos, incluidos el PSOE, han criticado al portavoz de Unidas Podemos por sus palabras a favor de estas manifestaciones.
Pero los incidentes, a juicio del diputado, no pueden hacer olvidar que España está «a la vanguardia» en materia de artistas condenados, que existen delitos que deben ser derogados porque atentan contra la libertad de expresión o la actitud de una «derecha que tiene un ADN predemocrático y mantiene «secuestrado» el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
En consecuencia, los disturbios han de servir para «reflexionar sobre todo esto» porque el ingreso de Hasél, condenado por injurias a la corona y enaltecimiento del terrorismo», ha sido la «llama» para que la indignación acumulada por situaciones de anormalidad democrática «explotase».
También ha dicho que cuando hay «excesos» del ejercicio del derecho de manifestación, «está la ley» que prevé consecuencias para quienes lo comenten, algo que entra dentro del funcionamiento normal de las instituciones.
«IR A UNA MANIFESTACIÓN NO PUEDE SER RIESGO DE PERDER UN OJO»
Por tanto, Asens ha insistido en que los incidentes violentos solo «estropean cada día más» los problemas y ha detallado que «se pone en la piel» de los vecinos que ven, al día siguiente, que el mobiliario está roto.
Sin embargo, esto no puede «ocultar» otra «violencia que preocupa». Por ejemplo, se ha referido a la manifestante catalana que ha perdido un ojo tras acudir a una de las manifestaciones y ha pedido a la Generalitat de Cataluña que revise los protocolos, de cara a impedir el uso de balas de foam. «Rapear no puede ser delito e ir a una manifestación no puede ser riesgo de perder la visión de un ojo», ha remachado.