Armenia confirma la muerte de un militar herido la semana pasada en los combates con Azerbaiyán

El Gobierno de Armania ha confirmado este jueves la muerte de un militar que resultó herido la semana pasada en los enfrentamientos con el Ejército de Azerbaiyán en la frontera común, en un nuevo repunte de las tensiones bilaterales.

El Ministerio de Defensa armenio ha señalado a través de su cuenta en la red social Twitter que el militar, identificado como Arthur Muradian, resultó gravemente herido el 14 de julio en un ataque contra un puesto del Ejército por parte de las fuerzas azeríes.

Así, ha señalado que el soldado ha fallecido durante la jornada en un hospital militar del país y ha trasladado sus «profundas condolencias» a su familia y sus colegas.

Las autoridades armenias han confirmado hasta la fecha un total de cinco militares muertos en los combates con Azerbaiyán, que ha informado por su parte de doce militares fallecidos, incluido un general, en estos enfrentamientos.

Por otra parte, ha manifestado en un comunicado que durante la madrugada del jueves la situación en la frontera «ha permanecido relativamente calmada», si bien ha apuntado a seis violaciones del alto el fuego por parte de las tropas azeríes.

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, reclamó el miércoles a los gobiernos de Armenia y Azerbaiyán una «desescalada inmediata y total» y expresó su «preocupación» por las hostilidades, según dijo el portavoz del organismo, Stéphane Dujarric.

«El secretario general ha reiterado su llamamiento a una desescalada inmediata y total, a evitar cualquier tipo de retórica provocativa y a volver a las negociaciones», manifestó, al tiempo que trasladó el apoyo de la ONU a los «importantes esfuerzos» en este sentido del Grupo de Minsk de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Armenia y Azerbaiyán viven enemistados desde el inicio del conflicto de Nagorno-Karabaj, en 1988, cuando este enclave, poblado en su mayoría por armenios y con apoyo del Gobierno de Armenia, decidió independizarse de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán. El Gobierno azerí perdió el control sobre Nagorno-Karabaj y siete distritos adyacentes tras una escalada de hostilidades en el período de 1992 a 1994.

Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno-Karabaj. El conflicto vivió una escalada de violencia en abril de 2016 y, si bien se logró pactar un nuevo alto el fuego, se siguen registrando enfrentamientos esporádicos en la zona fronteriza.