Aramco ganó un 24,7% menos en 2023, hasta 110.879 millones
Anticipa que la orden del Gobierno para mantener la capacidad máxima reducirá en unos 36.500 millones la inversión entre 2024 y 2028
Saudi Aramco, la mayor petrolera del mundo, registró un beneficio neto de 121.300 millones de dólares (110.879 millones de euros) en 2023, lo que supone una reducción del 24,7% con respecto al resultado récord contabilizado un año antes, aunque aún así la cifra supone la segunda mayor ganancia anual para la compañía en toda su historia.
La petrolera saudí explicó que la caída del beneficio en 2023 puede atribuirse a los menores precios del petróleo crudo y volúmenes vendidos, así como a menores márgenes de refinación y productos químicos, parcialmente compensados por una disminución en las regalías de producción durante el año.
A pesar de la disminución de los beneficios, la compañía aumentó un 30% los dividendos totales abonados en 2023, hasta 97.800 millones de dólares (89.398 millones de euros), declarando un dividendo base de 20.300 millones de dólares (18.556 millones de euros) para el cuarto trimestre, que se pagará en el primer trimestre de 2024.
Además, la junta de Aramco aprobó la tercera distribución de dividendos vinculados al rendimiento por un valor de 10.800 millones de dólares (9.872 millones de euros) y espera que la retribución bajo esta fórmula alcance los 43.100 millones de dólares (39.397 millones de euros) en 2024.
«En 2023 logramos nuestro segundo ingreso neto más alto hasta la fecha», ha subrayado Amin H. Nasser, presidente y consejero delegado de Aramco, destacando la resiliencia y agilidad de la empresa, que contribuyeron a flujos de efectivo saludables y altos niveles de rentabilidad, a pesar de un contexto de dificultades económicas.
«También cumplimos con nuestros accionistas con un aumento interanual del 30% en los dividendos totales pagados en 2023», añadió.
De su lado, la inversión de capital en 2023 alcanzó los 49.700 millones de dólares (45.430 millones de euros), incluidos 42.200 millones de dólares (38.575 millones de euros) de gasto de capital orgánico, lo que representa un aumento del 28% respecto de 2022.
De cara al ejercicio en curso, Aramco espera que las inversiones de capital oscilen entre 48.000 y 58.000 millones de dólares (43.876 y 53.017 millones de euros), y tiene la intención de continuar aumentando la inversión hasta mediados de la década.
Sin embargo, Aramco anticipa que la directiva para mantener la capacidad máxima sostenible en 12 millones de barriles por día, principalmente por el aplazamiento de proyectos aún no encargados y las reducciones en la perforación, reduzca la inversión de capital en aproximadamente 40.000 millones de dólares (36.564 millones de euros) entre 2024 y 2028.
«La reciente directiva del Gobierno para mantener nuestra capacidad máxima sostenible en 12 millones de barriles por día proporciona una mayor flexibilidad, así como una oportunidad para centrarnos en aumentar la producción de gas y hacer crecer nuestro negocio de conversión de líquidos a productos químicos», apuntó Nasser.
El pasado mes de enero, Aramco informó de que había recibido una directiva del Ministerio de Energía de Arabia Saudí para mantener su capacidad máxima sostenible (MSC) en 12 millones de barriles por día (mb/d) y no seguir aumentándola hasta los 13 mb/d.