La comisión Kitchen del Congreso aprueba mañana sus conclusiones con todos señalando a Rajoy y Cospedal, salvo PP y Vox

El PSOE y Podemos presentan textos distintos y los socialistas están más cerca de las propuestas del PNV

La comisión del Congreso encargada de investigar la operación Kitchen aprobará este miércoles sus conclusiones y pondrá fin a un año de trabajo señalando al ex presidente del Gobierno y del PP Mariano Rajoy a la que fuera su número dos en el partido, María Dolores de Cospedal, como responsables políticos de una trama organizada desde el Ministerio del Interior para espiar al tesorero de la formación Luis Bárcenas y robarle pruebas sobre la caja b u otros casos de corrupción vinculados a los populares .

Todos los textos de conclusiones que se someterán a debate, salvo los registrados por el PP y Vox, apuntan a Rajoy y Cospedal como conocedores de la trama y también como beneficiarios de la misma.

En esta última reunión de la comisión, a puerta cerrada, los grupos puede intentar pactar enmiendas a sus respectivos borradores de conclusiones hasta que se produzcan las votaciones. El texto que finalmente salga aprobado se elevará al Pleno del Congreso en 2022 para su ratificación definitiva.

El portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, ha mostrado su deseo de poder alcanzar un «acuerdo amplio» en torno a unas conclusiones que reciban el respaldo de más de la mayoría absoluta de la Cámara y también desde el PSOE se ha mostrado predisposición a negociar.

SEIS BORRADORES

Por lo pronto, los dos partidos que integran el Gobierno de coalición no se han puesto de acuerdo y cada uno registró el pasado lunes un texto de conclusiones. El PSOE firmó las suyas en solitario, mientras que Unidas Podemos las pactó con ERC, Bildu, Junts y la CUP. Por su parte, PNV, Ciudadanos, PP y Vox presentaron un texto cada uno.

Todos, salvo el PP y Vox, dan por probada la trama, asumen que se gestó en Interior bajo el mandato del ministro Jorge Fernández Díaz, con participación del secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y del entonces director general de la Policía, Ignacio Cosidó, y concluyen que se usaron recursos públicos, incluidos fondos reservados, para su ejecución.

Rajoy y Cospedal son señalados como conocedores y máximos beneficiarios del espionaje a Bárcenas. El PSOE considera que la trama se «ordenó» desde la cúpula del PP, pero evita hablar expresamente de responsabilidades políticas de sus máximos dirigentes. Sí plantea Cospedal estaba al tanto y era la que «informaba» a Rajoy.

Unidas Podemos y los independentistas hablan también de responsabilidad del marido de Cospedal, el empresario Ignacio López del Hierro, al que identifican como «socio» del ex comisario José Manuel Villarejo, imputado en el caso que se sigue en la Audiencia Nacional junto con el entonces Director Adjunto Operativo (DAO) Eugenio Pino.

ALGUNOS HAN MENTIDO

Entre otras cosas, estas formaciones solicitan que se investigue si aún opera alguna trama «parapolicial» similar a la Kitchen , sugieren que se envíen las conclusiones de la comisión al Tribunal de Cuentas para que, si lo estima oportuno, embargue al PP, y pide modificar la actual legislación sobre Secretos Oficiales y revisar los protocolos de control de los fondos reservados.

Asimismo, destacan que algunos comparecientes han faltado a la verdad ante la comisión, lo que supone un delito según el Código Penal y podrían enfrentarse a una pena de entre seis meses y un año o a una multa.

Ciudadanos aprovecha sus conclusiones para reivindicar sus propuestas para luchar contra la corrupción y, además, sugiere que se pida al PP que done para actividades de interés general las cantidades de dinero público que se utilizaron para sufragar la Kitchen y que lo haga a modo de «indemnización» una vez que sean cuantificadas por la Justicia.

PNV Y PSOE PUEDEN VOLVER A UNIR FUERZAS

Para el PNV, la comisión ha puesto de manifiesto que hubo un «incumplimiento flagrante de la ley; una acción para dificultar e impedir la recta administración de la justicia; y la producción de daños de difícil o imposible reparación para el crédito y buen nombre del Cuerpo Nacional de Policía, con afección grave a sus recursos, estructura y funcionamiento», una conclusión en la que coinciden con el PSOE.

Socialistas y nacionalistas vascos ya unieron fuerzas en la comisión de investigación cuando se decidieron los nombres de los comparecientes que debían desfilar ante la misma y podrían hacer lo mismo en su tramo final pactando las conclusiones.

Por su parte, las conclusiones del PP consisten en acusar a todos los demás de usar la comisión de investigación de formas partidista para tratar de someter a su partido a un «juicio sumarísimo», mientras que Vox se centra en aspectos jurídicos cuestionando que el Congreso puedan depurar responsabilidades cuando está investigando la justicia.

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